BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Raúl Lemos *). ¿Nos está sucediendo esto? Anteayer, tras el mensaje ruin viniendo de quien intervino dramáticamente en nuestras vidas endeudándonos con él mismo a 100 años, y en una muestra más de versatilidad metamórfica, Milei apareció disfrazado de judío balbuceando textos religiosos y derramando “paz” con mirada beatífica. Apenas horas antes tuvimos que asistir estupefactos al anuncio de nuevas plagas e infortunios, ya no bíblicos, de boca del hampón financiero con mueca tahúr alias “Ministro de Economía”. El que luego de los dólares, también fugó. Y cuya hermana Rossana Caputo, no ha sido citada a indagatoria por la jueza Capuchetti de Macri para explicar su conexión con el intento de magnicidio de Cristina.
Hemos conocido un nuevo rostro de la saga del presidente pulgar en alto y camperita deportiva azul bajo la de cuero verde. Esta vez en un modo tan místico, de negro y con kipá, que no facilitó el disimulo de su papada. Lo que no sabemos, es cuánto de lo que extrovierte la galería de sus personajes proviene sin solución de continuidad de su locura, y cuánto de maquinaciones maquiavélicas asimiladas con consciencia de un padre atroz e inmoral, según él mismo ha descripto. Ni cuán profundo ha calado la identificación iracunda de sus votantes. De ello depende en buena medida el punto de inflexión que inexorablemente sobrevendrá. Y nuestro futuro. Pero no todo es preocupación. Netflix se fue al demonio, pero el balde de pochoclo frente a las nuevas noticias es accesible. Por ahora…
(*) comunicador y militante de distintos espacios nacionales y populares.
Fuente: Grupo Wado por el Pueblo
