¿PUEDE HABER OTRA VACA MUERTA?: comienza la búsqueda de petróleo frente a Mar del Plata por parte de YPF y asociadas como Shell

El buque Valaris DS-17, emplazado a 315 kilómetros de la costa atlántica, frente a Mar del Plata, ha comenzado la perforación del pozo Argerich I, marcando el punto de partida para este ambicioso proyecto. (Foto: InfoNegocios).

MAR DEL PLATA, Buenos Aires (Especial para EL SOL ABC-Por InfoNegocios). Después de 18 años de espera, finalmente esta semana ha marcado el inicio de una nueva era para la exploración petrolera en el Mar Argentino. Equipos de Equinor, YPF, y Shell se han unido en una empresa que promete abrir puertas a nuevas oportunidades económicas y energéticas para Argentina.

El buque Valaris DS-17, emplazado a 315 kilómetros de la costa atlántica, frente a Mar del Plata, ha comenzado la perforación del pozo Argerich I, marcando el punto de partida para este ambicioso proyecto. Con un objetivo claro en mente, las compañías implicadas buscan evaluar el potencial de los recursos en la zona, priorizando la seguridad y el respeto al medio ambiente.

Según Equinor, esta primera etapa del proyecto tiene como objetivo principal obtener un mayor conocimiento del subsuelo, un paso crucial antes de que los expertos realicen un análisis exhaustivo de los datos obtenidos. La duración prevista para estas tareas exploratorias es de aproximadamente 60 días hábiles.

 

Números prometedores

Los números son prometedores: con un precio estimado del petróleo de 80 dólares por barril, la producción potencial del proyecto podría alcanzar casi los 6.000 millones de dólares anuales. Una cifra que podría ser crucial para la economía del país, especialmente si se considera el sueño del presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, de lograr un superávit comercial en energía de unos 30.000 millones de dólares anuales.

YPF, en su sitio web, detalla que el proyecto Argerich tiene el potencial de alcanzar una producción de 200.000 barriles diarios durante un período relativamente estable de entre 4 y 6 años. Además, se proyecta una vida útil del proyecto integral de 15 años, durante los cuales se estima una producción total de 610 millones de barriles.

Este proyecto también ha abierto la puerta a nuevas perspectivas en el mar Argentino. La concesión de 18 bloques petroleros en 2019, que abarcan varias cuencas, promete un futuro lleno de oportunidades para la exploración y producción de hidrocarburos en la región.

Sin embargo, la iniciativa no está exenta de controversia. Grupos ambientalistas como Greenpeace y la Asociación Argentina de Abogados/as Ambientalistas han expresado preocupaciones sobre el impacto negativo que la exploración petrolera podría tener en la biodiversidad marina. Estos grupos han presentado solicitudes al Juzgado Federal N°2, buscando una reconsideración de las medidas cautelares.

A pesar de las preocupaciones, el inicio de la búsqueda de “otra Vaca Muerta” en el mar Argentino representa un hito significativo en la historia económica y energética del país. Con la esperanza de grandes recompensas económicas y el compromiso de una operación segura y responsable, el proyecto Argerich encarna un paso audaz hacia el futuro energético de Argentina.

El potencial de este proyecto trasciende los límites del bloque CAN-100. YPF destaca que el potencial total de la Cuenca Argentina Norte podría ser hasta cuatro veces mayor, alcanzando aproximadamente 28 mil millones de barriles equivalentes de petróleo. Esta perspectiva no sólo abre nuevas oportunidades económicas para el país, sino que también podría redefinir su posición en el mercado energético mundial, consolidando su papel como un importante jugador en la industria petrolera internacional.

A medida que avanza la exploración en el mar Argentino, el país se enfrenta a un delicado equilibrio entre el impulso económico y la protección del medio ambiente marino. Si bien el potencial económico es innegable, es crucial que las autoridades y las empresas involucradas aborden de manera proactiva y efectiva las preocupaciones ambientales, garantizando que la explotación de los recursos se lleve a cabo de manera sostenible y respetuosa con el entorno marino. En este sentido, la transparencia, el diálogo con las partes interesadas y la adopción de las mejores prácticas internacionales son fundamentales para asegurar un desarrollo equilibrado y responsable en el mar Argentino.