LO QUE CUENTA EL CURA JUÁREZ SOBRE PERÚ: “La solidaridad, es la ternura de los pueblos”

Siguen las protestas en Perú, pero con menor intensidad. Habrá otro paro por tiempo indeterminado, dijeron organizaciones sociales. (Foto: archivo de EL SOL ABC).

LIMA, Perú (Especial para EL SOL ABC- Por Raúl Juárez *). Desde el lunes 6 al lunes al 13 de febrero de 2023, estuvimos en Perú un grupo de militantes políticos, sociales y de Derechos Humanos. En Lima principalmente.

Ya desde el viernes 10/02 hasta el 12/02 nos dirigimos distribuidos en equipos a las ciudades de Juliaca, Ayacucho, Ica, Cusco y otro permaneció atendiendo las diversas necesidades, tanto de coordinación, visitas oficiales a organismos del Estado y otras instituciones y en la escucha y recepción de las denuncias tanto de víctimas como de testigos directos.

En este primer tiempo en Lima, descubrimos que había más muertos que los que oficialmente el gobierno reconoce; que había desaparecidos, que hubo vejámenes sexuales durante y después de la entrada de las Fuerzas Armadas en el campus de la Universidad de San Marcos.

Martes 7/02: fue dedicada la media mañana para ofrecer una conferencia de prensa anunciando nuestra visita y nuestros objetivos. Observar en directo la situación y a través de denuncias personales tanto de víctimas como testigos directos.

Después de las conferencias de prensa, un grupo nos dirigimos a una cooperativa de alimentos que fue adaptada para dar alojamiento y demás servicios a los manifestantes que, desde las diversas provincias del interior, se habían desplazado a manifestar en Lima.

Por la noche fuimos con otro grupo a uno de estos albergues, organizado por jóvenes de otra zona de Lima. Allí tomamos nuevas denuncias y pudimos entender por dentro cómo es que funcionan estos grupos basados en la solidaridad, pues en este caso, alquilaron un espacio para más de 20 personas, consiguieron donaciones de alimentos, medicinas y otras necesidades. Al llegar, se estaba dictando un taller de primeros auxilios para jóvenes que actúan en medio de la violencia, socorriendo heridos o asfixiados por los gases lacrimógenos.

El jueves por la mañana, ya se hicieron notorias las reacciones locales a nuestra presencia. Los medios monopólicos peruanos comenzaron a publicar falsedades y calumnias sobre nuestras personas y algunas entrevistas a que fueron sometidos algunos compañeros fueron altamente violentas y de baja calidad periodística. Comenzaron las fake news. Los trolls estaban enardecidos.

 

En la primera marcha que participamos

El jueves después del mediodía, tuvimos participación directa en la marcha convocados por sindicatos de trabajadores y trabajadoras, especialmente por los obreros de la construcción. Nuestra participación fue para marcar presencia y observar en directo cualquier falta a los DDHH. No hubo ninguna cosa que lamentar y muchas y muchos peruanos adujeron que gracias a que nosotros estábamos observando allí, las fuerzas policiales no actuaron como acostumbraban hacerlo.

Desplegados en territorio, fuimos enviados a Teri Mattslac (California-México DF) y yo a Cusco.

 

Cusco, el ombligo del mundo

Nos encontramos con gran presencia de pueblos originarios. Pequeños agricultores, organizados en muchos grupos de pequeños campesinos de raza quechua.

Viajamos a Cusco dos personas. Recibimos denuncias los días 11 y 12 de febrero. Tuvimos poco tiempo para difundir nuestra presencia. Sin embargo, en Cusco la labor fue intensa, a pesar del miedo de las víctimas en ofrecer su declaración.

Fueron de muchísima ayuda la Asociación “Derechos Humanos sin Fronteras”, los jóvenes que actúan en directo en las marchas como ser las brigadas de primeros auxilios, la Brigada de Prensa y la Brigada de Abogados, quienes tienen acceso directo a los nombres de heridos y a las pruebas filmadas de los eventos.

Importante la presencia de varios abogados que, ad honorem, están asistiendo jurídicamente en defensa de las víctimas. Juntos hicimos un grupo de trabajo a destajo, llamando por teléfono y atendiendo en directo el testimonio de los testigos y víctimas. También hicieron de intérpretes del quechua al castellano y viceversa.

Entre los muchos casos se destaca la del líder campesino Remo Candia Guevara. Todo indica que se trata de un asesinato político, pues fue perseguido de entre la multitud para ser asesinado por las fuerzas policiales.

Hemos notado que dado el gran uso que el pueblo está haciendo de los medios alternativos de comunicación, los comunicadores sociales espontáneos están siendo censurados y ya tenemos registrada una denuncia de un caso de amenaza de muerte por ejercer el derecho a expresar sus ideas.

Un gran apartado se debe a las mujeres que actúan en los diversos niveles cumpliendo un rol de asistencia y logística como ser en primeros auxilios, o cocinando para los manifestantes y otros servicios logísticos, lo que ha motivado que ellas sean vulneradas por su condición de mujeres, indígenas y pobres.

Destacamos también la presencia de bandas organizadas parapoliciales, como ser los llamados “Polos Blancos” que actúan en coordinación con las fuerzas policiales.

El grado de tensión, por tanto, indica que va en aumento la violencia institucional. Si atendemos a la sistematización del ataque perpetrado a las víctimas, el uso desmedido de armas, incluso de largo alcance, y teniendo en cuenta el origen de las víctimas, en su gran mayoría campesinos y miembros de la raza quechua (pueblos originarios), tendremos que comenzar a trabajar sobre la hipótesis de Genocidio contra el Pueblo Originario Andino Peruano a manos de los tres poderes del actual Gobierno peruano.

De regreso ya a Lima, el lunes 13 de febrero, fue dedicado para dar los últimos retoques a nuestra conferencia de prensa con los resultados preliminares, aceptar entrevistas y organizar nuestro regreso por la noche.

 

Mi balance

– [ ] Esto clama al cielo. Son varios los delitos de lesa humanidad que se han cometido. Esto debería ser considerado por los Gobiernos Nacionales de nuestra región.

– [ ] La correlación de fuerzas es muy dispar. Cualquier intento en lo inmediato de cambiar la situación me parece casi imposible. Las casi 80 muertes son una muestra de lo que las fuerzas pro-neoliberalismo están dispuestas a realizar.

– [ ] La historia de múltiples opresiones y vida dura que llevan nuestros hermanos y hermanas de los pueblos originarios los hace particularmente resistentes y tienen claridad de lo que desean y piden.

– [ ] Todo esto hace la creciente tensión tremendamente inestable.

 

Para concluir, agrego las recomendaciones de nuestro grupo de Misión, luego de haber escuchado las denuncias de un número importante de testigos y víctimas.

Preliminarmente podemos concluir que se han cometido los siguientes delitos, que consideramos constituyen “Delitos de Lesa Humanidad”:

✔ Delitos contra la vida (homicidios).

✔ Delitos contra la integridad física (lesiones varias).

✔ Delitos contra la integridad sexual (abuso sexual).

✔ Delitos contra la libertad (privación ilegal de la libertad, detenciones arbitrarias, tortura).

✔ Delitos contra la libertad de reunión y el libre ejercicio a la protesta.

✔ Delitos contra la propiedad (daño).

✔ Delitos contra la libertad de tránsito.

✔ Delitos contra la libertad de peticionar ante las autoridades.

✔ Delitos contra la libertad de expresión.

 

Por lo que concluimos:

  • El Estado peruano debe ser investigado ya que, en el marco de la crisis social y política ocurrida a partir del 7 de diciembre de 2022, a través de sus Fuerzas Armadas y de seguridad regulares, habría asesinado, torturado, abusado, perseguido, amenazado e intimidado a vastos sectores del pueblo peruano.

La represión desatada impidió, limitó y condicionó la participación política, el derecho de reunión, de peticionar ante las autoridades, el derecho a la libertad de expresión y el derecho a la protesta.

  • El Estado peruano debe ser investigado, por haber desplegado sobre la población civil indefensa, prácticas represivas abusivas, desproporcionadas e ilegales, utilizando para ello armamento sofisticado y letal.
  • El Estado peruano debe ser investigado, por haber atacado de manera sistemática y generalizada a la población civil, especialmente a jóvenes de los barrios populares, estudiantes, mujeres, trabajadores del campo y la ciudad, indígenas, campesinos, líderes y lideresas sociales y prensa independiente.
  • Deberá investigarse al Estado peruano en referencia a los delitos de lesa humanidad señalados.
  • El pueblo peruano tiene derecho a la apertura de todas las instancias jurisdiccionales, nacionales e internacionales para obtener la reparación integral, a través de la verdad y la justicia.

 

(*) sacerdote de la diócesis de San Miguel de Tucumán, 
integra el ‘Grupo de Curas en Opción por los Pobres’, 
integrante también del ‘Espacio de Fe y Política NOA’.

 

Fuentes: Mariano Nano Ledesma, cura del Grupo de Curas en Opción por los Pobres, FM Comunitaria del Sur – SdE, Redcomsur