SAO PAULO, Brasil (Especial-UOL Brasil-Por Hygino Vasconcellos). En una entrevista con una emisora de radio del interior de São Paulo, en junio de este año, el PT dijo: “Es algo que vamos a tener que hacer: un decreto, una revocación de este secretismo que está creando Bolsonaro para defender a sus amigos”.
¿Pero podrá hacer eso si es elegido? Sí, según los expertos en transparencia escuchados por UOL. ¿Como? La Constitución Federal y la LAI (Ley de Acceso a la Información) permiten que esto suceda, según Bruno Morassutti, abogado y cofundador de la agencia independiente de datos Ficam Sabendo, y Júlia Rocha, coordinadora del programa de Acceso a la Información y Transparencia de la ONG Artículo 19, entidad dedicada a la defensa y promoción del derecho a la libertad de expresión y acceso a la información.
En la Constitución, la posibilidad está en el inciso 4 del artículo 84, que establece que son atribuciones del Presidente de la República “sancionar, promulgar y publicar las leyes, así como expedir los decretos y reglamentos para su fiel ejecución”. Es decir, Lula, de ser elegido, puede modificar el artículo 31 de la propia Ley de Acceso a la Información, que habla de 100 años de secreto.
En este caso, habría que presentar un proyecto de ley –que tendría que pasar por el Congreso Nacional– o dictar una medida provisional. Otra forma sería cambiar el Decreto 7.724, que regula la LAI, por otro decreto. En la Ley de Acceso a la Información, la posibilidad de remoción del secreto por parte del presidente está en el artículo 29: “La calificación de la información será reevaluada por la autoridad de clasificación o por una autoridad jerárquicamente superior, previa provocación o de oficio, en los términos y plazos previstos en la norma, con miras a su desclasificación o a la reducción del plazo de confidencialidad. Se debe examinar la permanencia de las razones del secreto y la posibilidad de perjuicios derivados del acceso o divulgación de la información”, que la decisión de clasificar, desclasificar, reclasificar o reducir el período de confidencialidad de la información debe estar convalidado por otro decreto.
Muchos creen que este decreto sancionado por Bolsonaro, fue realizado para tapar los grandes negociados denunciados de amigos y familiares, y de parte también del entorno político del presidente.
Anoche, gran decepción en las caras de familiares, especialmente en los hijos de Bolsonaro, y del entorno próximo del presidente, porque saben que “en algún momento van a tener que ir a dar cuenta de sus actos de corrupción a los estrados de la Justicia”.
