SAO PAULO, Brasil (Especial para EL SOL ABC-Por América Magalhaes do Brito). Se ha visto que hubo manipulación de datos de parte del Colegio Electoral de Brasil, porque al final, recién, se subieron los datos donde Inácio Lula da Silva había ganado con comodidad. De todas maneras, el claro triunfo del ex presidente por dos períodos solamente es un trámite para que el 30 de octubre se alce definitivamente con la victoria. En sí es una agonía para Jair Bolsonaro, un presidente que nunca estuvo preparado para ser primer mandatario de un país, que ayer el pueblo le dijo no a tanta humillación, a tanta homofobia, a tanta discriminación, a tanta corrupción de parte de su familia y a no entender los momentos que vive el mundo, tras los sucesos de la guerra en Ucrania, además de la pandemia del Covid-19.
Por supuesto, que dentro del análisis que hago para mis colegas de EL SOL ABC, cuenta que a pesar de que en el último año Bolsonaro se haya dedicado a realizar políticas sociales en favor de la población —como entrega de bolsones de comida, baja en los impuestos a la gasolina y aumento en las ayudas sociales para sectores desfavorecidos— ha pesado mucho en esta elección “la alta corrupción de sus hijos en dos hechos gravísimos que los grandes medios trataron de tapar: la compra de vacunas de Covid a 9 dólares y sobrefacturadas a 21 dólares, por parte de los hijos; los grandes incendios en el Amazonas, para negociados en la extracción y venta de madera, como de la venta de tierras a colonos, además del contrabando de armas; todos negocios manejados por los hijos de Bolsonaro”, según denunciaron los medios de prensa alternativos.
Por qué Bolsonaro dio vuelta la encuestas
Muchos analistas consultados, luego de los resultados de anoche, que daban a Lula ganador cómodo en primera vuelta, dijeron que hay que tener en cuentan varios factores que a veces muchos no analizan:
- El trabajo de las redes sociales, especialmente WhatsApp, donde los grupos cambian tendencias a última hora, cuando la gente no está preparada o formada para la política y vota “por lo que dice el amigo o sigue tendencia”.
- El mejor manejo de call centers de parte de los focus groups armados por los partidarios de Bolsonaro, principalmente en las grandes urbes de Brasil, “haciendo creer que se viene el comunismo”.
- Que la gente con poca escuela le cuesta dominar la tecnología del voto electrónico y es allí que las franjas de partidarios de Lula “patinaron” para votar, en la franja que va de los 58 a los 90 o más años. Porque se demoran más, y al final votan “cualquier cosa”.
- El reparto de dinero en miles de “punteros políticos” en las favelas pobres de Brasil.
- El trabajo de los “evangélicos” en los barrios pobres, “haciéndoles creer a los pobres que Lula representa el comunismo y que no cree en Dios”.
Por qué Lula va a ganar
Primero, porque aplicando las Ciencias Exactas, a Lula sólo le falta recoger un 1,5 % de los votos, mientras que a Bolsonaro le falta un 7 %. Además, tanto Ciro Gomes como Simone Tebet recogieron un 7 % y dijeron muy claramente: “En caso de balotaje, nos inclinaremos directamente por Lula, porque Bolsonaro ha demostrado que es un hombre muy egoísta y muy corrupto, y que Brasil tiene que recuperar liderazgos en el mundo, que los había conseguido con Lula”. Todo ello, más los ajustes que tiene que hacer el equipo de campaña de Lula, que anoche expresó que la campaña va estar centrada en el Estado de Sao Paulo y en Río de Janeiro, se va a lograr finalmente la presidencia por parte de Lula, que fue vilipendiado y encarcelado injustamente por el “lawfare” instalado por EE.UU., conjuntamente con sus agentes locales, como Sergio Moro, y que la gente no olvidará jamás.
Y ante ello, no se puede luchar. Sólo hay que admirar, por más redes sociales que existan.
