BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Ana Argañaraz). La gente en las calles de todas las capitales de las provincias es un fuerte y directo mensaje para los gobernadores, diputados y senadores que quieren “apoyar una ley que desde el vamos ataca el bolsillo y los derechos de los trabajadores, la educación como la salud pública, en un afán maquiavélico de destruir el Estado nacional”.
La reacción vino luego del discurso en cadena nacional de Javier Milei, donde lo que más repercutió en la conciencia y en la paciencia de la gente, es cuando éste dijo que “ya no tendremos un Estado presente”. Fue tal el latigazo, que muchos dijeron “esto no puede continuar más”.
Y así salieron a expresarse millones de personas para decirle claramente a los gobernadores y los legisladores nacionales, que a este personaje salido de algún “focus group” pagado por los empresarios Eduardo Elazstain y Eduardo Eurnekian, no “puede ni debe traspasar los límites de la razonabilidad y apego a las normas impuestas por leyes que emanan de lo que expresa la Constitución Nacional”.
De seguir los gobernadores insistiendo “con la gobernabilidad del sujeto de marras”, estarán insistiendo en cavarse sus propias tumbas políticas porque la masividad de la protesta les está diciendo: “Una cosa es debatir para mejorar lo que está mal y otra muy distinta, es la aplicación de viejas fórmulas aplicadas en el país y que nunca dieron resultados. Con el consiguiente alejamiento de las pautas económicas que una población de casi 50 millones de personas necesita para vivir decentemente”. Los mismos economistas que ayudaron “a parir este fenómeno (en el sentido negativo) que se llama Milei”, como Maslatón, Rodríguez, López Murphy y otros avizoran un negro panorama económico porque “las medidas tomadas están afectando a los que proveen de dólares al Banco Central como el campo, pero también a las distribuidoras de gas y electricidad”. Esto puede provocar un shock económico de imprevisibles consecuencias, dicen los consultados.
