LIBERTADOR GRAL. SAN MARTÍN, Jujuy (Especial-EL SOL ABC). Dentro de todas las arbitrariedades del intendente Oscar Jayat como atentado contra las buenas costumbres este alcalde las ha cumplido todas. Desde cerrar una calle, para luego volverla a abrir; o no hacerse cargo de la falta de obra de canalización, donde fue arrastrada por la correntada, luego de fuerte tormenta, la estudiante María Machuca en abril de 2019; o de mandar hacer campaña sucia contra la concejal Patricia Gutiérrez, en tiempo de campaña electoral; o de aumentarse los sueldos y detectarse sobresueldos, por los que tiene denuncia penal; o decir que su esposa trabaja ad honorem en área social y luego se detecta “excelente sueldo” en las planillas de cobro municipal; o cuando participa del acto eleccionario fraudulento, junto a Olver Legal, Marcelo Llanos y Roque Rodríguez, en la Cooperativa Telefónica para posesionar a la familia López Rita-Ponce de León; o cuando desencadena persecución laboral contra las mujeres y hombres que trabajan en la sección de Barrido y Limpieza, con suspensiones fuera de la ley por protestar por mejoras laborales y denuncias de discriminación y acoso laboral; o cuando un funcionario de su riñón, como el Cuny Fernández, lo denuncia por desvío de fondos y robos, como sobrefacturación en compra de maquinarias viejas y usadas, o alquileres de las mismas. Y así un rosario de hechos delictivos que demuestran cabalmente hasta dónde puede llegar el “intendente que venía a poner claridad y orden, como transparencia, en el Gobierno de Orden, Paz y Trabajo”.
Negocio en cuarentena
Si alguien tiene mala memoria, basta recorrer las páginas de EL SOL ABC y de otros medios, que en sus archivos guardan todas las tropelías causadas por Oscar Jayat al frente del Ejecutivo municipal, que ahora nos desayuna con que “cierra un negocio de golosinas, cigarrillos y bebidas varias, justo cuando está cerrado por las normas provinciales por el coronavirus”. O sea, cierra lo que no funciona: o estamos todos locos, o el intendente sufre de una paranoia delirante por culpa de la cuarentena, o hay una intencionalidad política de perjudicar al concejal Ariel Fernando Sanconte, esposo de la propietaria del referido local comercial.
Sin entender razones, los esbirros municipales se presentaron y cerraron lo que está cerrado, ya que por estar alejado de lugares de movimiento de gente, porque se ubica sobre la ruta, los hijos del concejal se turnan para hacer de serenos y cuidadores, para cuidar la mercadería como del mobiliario del mismo. “Toda la cartelería está guardada y estamos adentro, porque tenemos internet; pero no atendemos”, dijeron los hijos del concejal.
Desde otros ámbitos salieron a cruzar a los funcionarios municipales autores de la “hazaña gubernativa”, como al mismo Jayat, “porque todo esto entra dentro de una trama persecutoria contra el concejal Sanconte”. Otros como el Dr. Reynaldo Barrera dijeron que “esta clausura está direccionada, por ser esposa de un concejal opositor busca amedrentarlo. Ante una acción siempre hay una reacción que se manifiesta de diversas maneras”.
