ESCASEZ DE AGUA AFECTA A URUGUAY: mientras Lacalle sigue escondiendo a Pepín, casi todo el país está afectado por fuerte sequía

El estado de las cañerías en Uruguay es deplorable. Lo muestra este caño maestro en Piriápolis, lugar donde también se siente la fuerte sequía. (Foto: Marcelo Umpiérrez-El Observador).

MONTEVIDEO, Uruguay (Especial para EL SOL ABC). Mientras el presidente Lacalle sigue inmerso en romper el Mercosur y la CELAC y dar refugio a toda la dirigencia de la derecha argentina, acusados por la Justicia de delitos contra el Estado argentino, una fuerte sequía asuela el territorio oriental, tanto que la OSE (Obras Sanitarias del Estado) ha salido a dictar una serie de medidas restrictivas con respecto al uso de agua en casi todo el territorio.

A mediados del mes de enero pasado El Observador informaba sobre la “escasez de agua en zonas del departamento de Maldonado, donde tiene asiento la famosa playa Punta del Este, lo que ocasionaba disgustos a los argentinos, en su gran mayoría, que habitan por estas zonas”.

El director de OSE Maldonado, Jesús Bentancur, dijo que “esto lo venimos sufriendo desde noviembre del año pasado, pero ahora en enero se ha incrementado la escasez de agua”, en aquella oportunidad según dijo El Observador.

El diario argentino Ámbito abundó por estos días sobre lo que ocurre en todo Uruguay, al informar que “ante las dramáticas consecuencias de la sequía en gran parte del territorio del Uruguay, el directorio de OSE resolvió este viernes al mediodía ‘prohibir’ el uso no esencial de agua en Montevideo y Canelones –incluido Costa de Oro–, y en Lavalleja, Colonia, Florida, San José y Soriano, a partir de mañana (11/02/23).

“OSE ha exhortado a la población a consumir responsablemente el agua potable, con el objetivo de minimizar usos no prioritarios’, expresó el comunicado oficial del directorio, que detectó un consumo muy cercano al límite ayer en la capital del país. La medida comenzará a regir a partir de este sábado 11 de febrero por tiempo indeterminado”.

Como se sabe, aparte del problema del agua, Lacalle ha ordenado romper los acuerdos que tiene con Argentina y con el Mercosur y CELAC, que “es no prestarse a ningún vínculo con Gran Bretaña en las Islas Malvinas, de propiedad de la República Argentina, para brindar transporte o apoyo comercial, mientras dure el bloqueo y asentamiento de la OTAN en dichos territorios”.