EL PLAN DE CAMBIEMOS: Macri pretende convertir la Argentina en Argenhaitina, pero además confesó que “dejé una bomba” y que pretende despedir a 600 mil personas del Estado

Mauricio Macri mostró los pocos argumentos que le quedan, luego del desastroso gobierno que llevó a cabo desde 2015 a 2019, sin pandemia y sin guerra en Ucrania, en la presentación de su libro. (Foto: Página 12-Jorge Larrosa).

 

BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Ana Argañaraz). Ayer por la tarde el ex presidente Mauricio Macri hizo la presentación de su publicitado libro “Para qué”, donde delinea las principales trazas de un posible gobierno suyo.

El episodio casi anecdótico sobre la presentación del texto, que no lo escribió él, sino que contó con la ayuda de avezados estudiantes de comunicación, que pertenecen al PRO, todos ellos supervisados por Darío Nieto, que hizo las veces de compaginador y coordinador de las ideas puestas en marcha por Macri, mediante grabaciones. O sea, que al final no lo escribió, sino que lo dictó. Ahora falta saber “quién le dictó” el libro al ex mandatario. Es un secreto que se maneja bajo siete llaves. Algunos han tirado pistas, sobre que economistas del CEMA habrían sido los gestantes del boceto para el libro. Entre ellos Roque Fernández y Ricardo López Murphy.

Lo cierto, es que la Rural se puso de fiesta para el lanzamiento político de Mauricio Macri y con la presencia y ausencias —quizás estén indicando el camino que pueda tomar la UCR— muy notorias de Elisa Carrió, Gerardo Morales, Alfredo Cornejo, Juan Schiaretti, Facundo Manes, Susana Giménez, Eduardo Feinmann, Nelson Castro, Baby Etchecopar, Jorge Lanata, Mirtha Legrand, Alfredo Leuco, María Santillán, Morales Solá, Jonathan Viale y la “armada brancaleone” de Revolución Federal, ahora todos presos, se trató de mostrarse unidos y felices para plantear barbaridades del tono de que “no me banco más a los progres” y que “ahora nos van a dejar una bomba peor de la que les dejé yo” (endeudamiento premeditado), dando por sentado que “lo que hizo estuvo fríamente calculado”.

 

Presencias que no se quieren bajar del vagón

Sabiendo que el PRO ha comenzado a desprenderse, sin querer, de Juntos por el Cambio y habiendo la UCR sopesado el plan real del macrismo, que es utilizarlos otra vez como “furgón de cola”, es que los radicales y los principales dirigentes de la Coalición Cívica creen que un nuevo posicionamiento de Mauricio Macri al frente de Juntos por el Cambio, haría que el triunfo del Peronismo fuera más fácil. “Las mismas cosas esbozadas en el libro, son una bomba de alcance masivo, porque el pueblo está palpando la recuperación del país, en medio de una cuasi guerra mundial y con una pandemia de por medio, para que este centenar de atorrantes —que ya gobernaron y dejaron un país en llamas— pretenda volver a gobernar”, dijeron desde la Coalición Cívica.

Mientras voceros de Durán Barba dijeron que esta postura del macrismo de decir las cosas crudamente, es “porque ya gobernaron y no tienen margen para otro discurso, que no sea éste de destrucción del Estado. Porque si les va mal, nadie puede echarles la culpa de nada porque lo dijeron todo”, señalaron.

Los presentes, todos con sonrisas angelicales, María Eugenia Vidal, Jorge Macri, Patricia Bullrich, Diego Santilli, Cristian Ritondo, Gabriela Michetti, Miguel Ángel Pichetto y Ramón Puerta. Mientras que en la segunda fila los tuiteros Hernán Lombardi, Martín Tetaz, Javier Iguacel, Florencia Arietto, Néstor Grindetti (el Rasputín en las sombras en Independiente de Avellaneda), Javier Iguacel, Waldo Wolf (Revolución Federal y Los Copitos), Roberto García Moritán, Maximiliano Guerra, Juan Acosta, Federico Andahazi, Guillermo Dietrich y Darío Nieto. A muchos llamó la atención el faltazo de Pepín Rodríguez Simón, de Ximena Tezanos Pinto y de las blondas rosarinas Carolina Losada y Amalia Granata. Parece que han comenzado a despegarse de Macri muchos.

 

Vamos a Argenhaitina

Entre las locas propuestas de Macri y sus asesores, que son señaladas en el libro, están las que pretenden gobernar sin ministerios de Cultura, Turismo, Salud, Educación, de Defensa y dar de baja otros estamentos del Estado como Conicet, PAMI, Anses, Télam, TV Pública, Radio Nacional, Área Material Córdoba, Tandanor, Fabricaciones Militares, Aerolíneas, etc., con el que se pretende mermar unos 600 mil empleados públicos. Lo que provocaría, innecesariamente un “shock en la economía nacional” de imprevisibles consecuencias.

Lo mismo con las jubilaciones, que se privatizarían hacia un modelo parecido de las AFJP, donde sólo se van a jubilar los que hagan aportes, pero lo más grave sería que “lo que se cobre quedaría al arbitrio de la rentabilidad de las empresas aseguradoras”.

Así, luego de las sonrisas dentro del salón de la Rural, los invitados tuvieron que salir a dar la cara y a ver la realidad, y uno de los más desencantados fue Rodríguez Larreta, donde atisbó que “no dijo nada nuevo y que en sí entierra las posibilidades de Cambiemos. Porque de esta manera va a llevar a la Argentina a que sea un país como Haití, donde 100 familias son dueñas de todo y es por eso las continuas crisis de muertes y hambre, en un país que está al borde de una guerra civil”, moviendo la cabeza dijo uno de los cercanos al jefe de Gobierno porteño.

En sí, a mi también me quedó la misma sensación.