BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC). Siempre muchos miraban con mucha desconfianza a Cristiano Rattazzi, que siempre que tenía oportunidad de declarar ante la prensa nunca alababa a los gobiernos que “cobran impuestos y controlan el comercio de ingreso y egreso de bienes del país”. Para él siempre eran un estorbo a sus pretensiones fraudulentas de vivir casi al filo de la ley. Esta denuncia así parece demostrarlo.
Muchos creen que, por ello, Fiat de Italia le sacó su puesto de ceo de Fiat Argentina, porque “su postura política y personal estaba perjudicando el devenir comercial de la firma automotriz, una de las grandes del país”.
Lo cierto, es que por denuncia de Aduana –organismo de la AFIP— Rattazzi deberá ir a indagatoria ante la Justicia Penal Económica por contrabando agravado de vehículos de alta gama de su empresa Modena Auto Sport tras una maniobra fraudulenta con el ingreso de automóviles de lujo como Lamborghini, Porsche y Rolls Royce.
Página 12 ahondó en la información, destacando que “de acuerdo al expediente judicial, la maniobra habría consistido en acompañar las importaciones con facturas en las cuales se consignaba el valor básico de los vehículos objeto de importación, para pagar menos impuestos por estas operaciones. Combinadas, las multas pretendidas por la Aduana superan los $us 80 millones. Los investigadores detectaron “la existencia de otras facturas por montos superiores por idénticos vehículos que incluían conceptos adicionales facturados por los proveedores del exterior, que conforman el valor final de la mercadería ingresada al país”, explicaron las fuentes consultadas por la agencia Télam.
La Justicia
Continúa Página 12: “La indagatoria fue dispuesta por el juez Alejandro Catania. También fueron citados el empresario Julio Cesar De Marco, de la firma Modena Auto Sport S.A., y Gonzalo César De Marco. Horas más tarde, el propio Rattazzi habló con el diario La Nación y dijo que él “no tiene nada que ver”. “¿Sabés la cantidad de veces que me han llamado a indagatoria? Es una cuestión inventada por motivos políticos”, comentó.
En la misma causa se investiga la importación de un vehículo documentada mediante un despacho de importación en el cual se habría declarado mercadería “sin uso”, cuando en realidad sería usada –de acuerdo con el kilometraje del vehículo-, para eludir la prohibición de traer vehículos usados.
Además, se investiga la presentación ante el servicio aduanero de una factura donde surge que el vehículo en cuestión habría sido adquirido por Modena Auto Sport S.A. a TransCargo ZFM S.A., caso en el que los investigadores detectaron la existencia de otra factura por idéntico vehículo emitida por la firma The Collection a Modena Auto Sport S.A. Se investiga también la importación de vehículos de alta gama, por medio de la utilización de facturas comerciales presuntamente apócrifas, con la finalidad de subfacturar el valor de los vehículos en cuestión.
