SALTA (Especial-EL SOL ABC). El posicionamiento político del presidente de la Agrupación Tradicionalista Gaucho de Güemes, Francisco Aráoz, no es nada nuevo en Salta. Ya en 2018 se descubrió macrista a ultranza, cuando mandó a un grupo de amigos y seguidores de la entidad gauchesca que preside a despintar los símbolos de los pañuelos de las Madres que se habían pintado en derredor del monolito de Martín Miguel de Güemes, en plaza Belgrano de esta ciudad.
La polémica volvió tras de este personaje, como Aráoz, que dice representar “los ideales del Gral. Martín Miguel de Güemes, cuando se sabe que el Héroe máximo de la salteñidad jamás hubiera sido macrista porque representa la antítesis de la ideología del actual presidente de la agrupación gaucha, cuando defendió con sangre y fuego, lo que hoy es territorio argentino de las fuerzas realistas. Mientras que el macrismo, no sólo abrió las puertas para que las corporaciones extranjeras se adueñaran del territorio nacional, sino que entregó el oro de reservas del Banco Central de la República Argentina, además de endeudar al país en más de 120 mil millones de dólares y la persecución ideológica de sus adversarios políticos con una Justicia afín”, expresó el padre Jorge Crespo, que en conjunto con destacados intelectuales salteños critican el posicionamiento de una agrupación gaucha que nos representa los verdaderos valores del Gral. Martín Miguel de Güemes.
El enojo
Según informaron varios medios provinciales, el enojo de Aráoz nació porque no se dejó desfilar a los fortines gauchos de Salta y porque tampoco se dejó que se hiciera la tradicional “guardia bajo las estrellas”, que se acostumbraba a realizar el 16 de junio a la noche, en vísperas de los recordatorios de la muerte del Gral. Martín Miguel de Güemes, que hace 200 años falleció un 17 de junio de 1821.
El Tribuno informó que “Aráoz increpó al Presidente”, cuando el responsable por el protocolo sanitario es el Gobierno de la Provincia por intermedio del COE. Allí el decano de la prensa salteña informó que “me acerqué al Presidente, me saqué el sombrero y le dije: ‘Señor Presidente, soy Francisco Aráoz, presidente de Gauchos de Güemes. Usted vino a nuestra casa y nos está faltando el respeto, nos están atropellando. Esto es un circo, nosotros no podemos permanecer aquí, nos vamos a retirar, con el respeto que merece su investidura”, contó Aráoz, visiblemente frustrado con el desarrollo del acto y por no haber realizado la guardia gaucha bajo las estrellas, como tradicionalmente se hace cada 17 de junio.
“Entonces él me contestó: ‘Yo no tengo nada que ver con esta organización, depende de tu gobierno’ (en alusión al gobernador salteño Gustavo Sáenz). Le dije: ‘Yo lo sé, y nos faltaron el respeto, nos escupieron en la cara, nos vamos’. Y él me dijo: ‘¿Te explicó el gobernador que no se puede desfilar?’, y le respondí: ‘Sí, y no desfilar lo aceptamos a pesar de no estar de acuerdo, pero el circo no; no pertenecemos a esto”, agregó Aráoz en declaraciones a Telefe en Salta.
De esta manera Aráoz muestra que, por figurar, el reclamo no lo hizo ante quienes realmente tendría que haber presentado su queja, cuando Salta está subiendo muy peligrosamente la curva de contagios y cuando él sabe que tiene cambiados sus ejes ideológicos, porque el máximo prócer de la salteñidad no sólo utilizaba el uniforme gaucho para figurar sino para defendernos de las garras extranjeras.
