BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Y la situación que vivía el entorno “duro” del presidente Alberto Fernández decantó por donde nuestro columnista Servando Sanmartín [1] en su nota de ayer —“CRISTINA-ALBERTO: dos modelos dentro de uno”— había señalado como el principal receptor de la críticas de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, cuando desde EL SOL ABC escribió: “Bueno esta presentación que comenzó a mostrar a Martín Guzmán, cuando la cámara lo comenzó a enfocar, con otro color en la cara y asimilando el ‘golpe duro’ en su humanidad, toda vez que sectores desde donde proviene la mayoría del grupo Callao, no admite ‘la singularidad y positividad de la gestión del ex ministro Axel Kicillof entre 2012 y 2015 dentro del Palacio de Hacienda’, ni tampoco el alto desendeudamiento a lo que el ex presidente Néstor Kirchner llevó al país y que Cristina luego administró magníficamente –con tensiones de por medio— para entregar un país con una inflación que rondaba el 25 %, con el mejor sueldo mínimo en dólares de todo Latinoamérica que rondaba los 600 dólares y baja desocupación, que llegó al 5,6 % de la población”.
El 7 de mayo pasado, al otro día del otorgamiento del título de Doctor Honoris Causa, a la Vicepresidenta en Resistencia (Chaco), nuestro corresponsal en aquella provincia del NEA y perteneciente al Norte Grande, escribió bajo el título “ ‘CÁTEDRA DE CRISTINA: quedó en evidencia el ‘Triángulo de Bermudas’ del Gobierno: Kulfas, Guzmán y Moroni’: [2] Y en ese tren, es bueno destacar que contando varias de las infidencias sobre distintas etapas que ella vivió, nos quedó una flotando en la memoria y que demuestra de porqué el Gobierno no le ‘encuentra el agujero al mate’ al tema de la inflación. Es allí que esta Corresponsalía de EL SOL ABC define como ‘El Triángulo de Bermudas’ del Gobierno, donde todas las buenas acciones que pudiere acometer ‘se pierden en la debilidad de los ministros (Kulfas, Guzmán y Moroni) y que el mismo Presidente avala a la hora de plantarse ante las corporaciones, que ‘no quieren acordar ni mucho menos’ sino que son parte de una estrategia para debilitar la gestión’, donde los únicos que no se dan cuenta son los nombrados y que Cristina destacó cuando contó que ‘cuando se tenía que elegir al secretario de Comercio Interior, yo había mandado a un economista joven, de muy buena predisposición y con muy buenas ideas para corregir el problema de la inflación, le dije que lo fuera a ver a Kulfas. Allí mi enviado le explicó el plan, pero el ministro le dijo claramente que ‘eso no se puede hacer, porque ellos están para el diálogo y para los acuerdos’. Bueno, señores, bajemos las persianas”.
En sí, desde EL SOL ABC, vinimos destacando el flaco rol que venía cumpliendo este ahora ex ministro Matías Kulfas, luego de las reiteradas declaraciones del ex secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, donde daba a entender que “yo no puedo hacer milagros, más no puedo hacer”, cuando de esa forma daba a entender que había una limitante. Lo mismo sucedió con el “nombramiento a medias de Débora Giorgi como secretaria de Feletti”, donde la funcionaria adujo “un manoseo institucional” de parte del ex ministro Kulfas, que no firmó su contrato como funcionaria de la Secretaría de Comercio Interior.
Entonces, son una suma de errores políticos, porque a la luz de los acontecimientos, es la política el motor, bajo de grandes decisiones, para “cambiar el sentido de las cosas, de las situaciones”. Bueno, la Vicepresidenta otra vez dio un fuerte mazazo con su discurso del viernes en Tecnópolis, que indudablemente uno de los que se sintió aludido salió a responderle en off y quedó tan expuesto, que su asiento en el Ministerio de Producción no podía durar un minuto más. Donde debemos decir, los reflejos del Presidente fueron instantáneos y salió –lo creemos— fortalecido por su acción de pedirle la renuncia a Kulfas, no sin antes haber declarado vía Twitter que “la Vicepresidenta tenía razón”.
De esta manera, el Frente de Todos se fortalece, pero hay que ponerle el ojo a lo que pasa en el Banco Central, donde “tampoco se hace mucho” para parar la salida de dólares. Mientras Guzmán tiene que comenzar a mostrar que “la inflación va a comenzar a bajar”, porque sino es junto a su reciente elegido secretario Hang, los que deberán eyectarse por sí solos. Muchos contaron, que, en la última reunión de gabinete nacional, en presencia de Juan Manzur, Guzmán dijo muy claramente: “Les aseguro que el Peronismo va a ganar las elecciones en 2023, porque los estudios de las variables económicas más sensibles están teniendo resultados sorprendentes”.
Referencias:
[1] https://www.elsolabc.com/cristina-alberto-dos-modelos-dentro-de-uno/
