SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial para EL SOL ABC-Por Francisco Deoli). El que “se siente presidente”, aunque antes se siente “emperador de los valles y puna jujeños”, estuvo por estos días, en acto de campaña y tratando de levantar la imagen del intendente Jayat, en Libertador Gral. San Martín, donde se lo vio jocoso y casi abriendo la botella de champán antes de tiempo.
Allí se vio que poca gente sigue al macrismo, sólo los parientes de los funcionarios, algún distraído y los que hacen radio municipal, ocuparon las sillas del acto donde Morales casi dice que “va hacer de nuevo a Libertador”. Como si le gente fuera tonta: habló de las refacciones de escuelas y ampliaciones y que el nuevo hospital (con precios súper inflados) “todo se hace gracias al dinero que producen los parques solares”. Lo que es una de las tantas mentiras que Morales tiene bajo la manga, ya que de nuestras fuentes y archivos sabemos por sendas notas que hemos publicado desde EL SOL ABC, todo ello viene de fondos nacionales que la Provincia recibe y que son desviados para construir las obras de la cárcel en Chalicán, el hospital Orías y la nueva escuela de San Pedro, además con créditos del Banco Interamericano de Desarrollo. También por el permanente “ahorro”, que es pagar los sueldos más bajos del país a todos los estatales de Jujuy.
O sea que el costo es altísimo para la Provincia, porque la próxima administración gubernativa “queda atada de pies y de manos”, para que siga pagando sueldos bajísimos. Donde el emperador tuvo el tupé de decir “la inflación la genera el Gobierno nacional”, cuando gracias a ese Gobierno nacional pudo tener las vacunas a tiempo, se le siguió enviando dinero para los planes “Potenciar Trabajo”, que el marido de la Tulia los toma “como si él de dadivoso entregara esos planes”. Pero además él es tan culpable como Macri del atroz endeudamiento del país, cuando ordenó a diputados y senadores jujeños aprobar sin chistar todo lo que ordenaba el ex presidente (recordar que a cada rato se le invitaba a Humahuaca para chayar el choreo).
La frutilla del postre
Y como un lacayo más, el que “se siente presidente”, se inclinó mágicamente, luego de sentirse “emperador en Libertador (el único que lo aplaudía era Jayat y su mujer)” ante su “excelencia”, don Marc Stanley, que también está en campaña atizando a la oposición, porque le han avisado que una “nube negra se cierne sobre el macrismo y todos sus alcahuetes en las elecciones generales de octubre”, a pesar de “todo el esfuerzo de la CIA, Mossad y embajada norteamericana y la famosa AmCham, que llegara a Jujuy “a pasar los carnavales”.
Morales, tan sinvergüenza como es, casi le da un pico en la boca a Stanley a su llegada al aeropuerto Horacio Guzmán en Ciudad Perico. Pero que como “presidente ya elegido” –según él— demostró poca cordura y soberanía, ante quien viene a controlar de cerca si el litio le sigue perteneciendo y a decirle que “se baje de la candidatura a presidente, porque eso perjudica a Rodríguez Larreta, o a la misma Patricia Bullrich”. Por lo menos eso se filtró de las conversaciones del “lacayo más eficiente” con don Marc.
Rodríguez Larreta, otro con poca cordura, ya sin máscara, también se arrodilló ante su “excelencia” Stanley, mostrando un grado de sumisión que ningún argentino que se precie como tal puede tener. Y más si quiere ser presidente. La Tulia chocha.
