SALTA (Especial-EL SOL ABC). Ayer a media mañana se armó un revuelo padre en el Centro Cívico Municipal, cuando uno de los asistentes a ese centro municipal de atención al público manifestó “sentirse mal y descompuesto y con dolor de cabeza”, por lo que urgentemente se activaron los controles por el coronavirus.
Personal policial, como de salud, implicado en la vigilancia en el CCM rápidamente sacó al “afectado”, que luego resultó ser “un sujeto que provenía de Buenos Aires y que había ingresado en un camión de mudanzas”. Luego se le inquirió por qué hizo eso. A lo que contestó: “Porque estoy cansado de hacer cuarentena en Buenos Aires y me vine a Salta a tomar nuevos aires”, así sin ningún escrúpulo ni pensando en lo que tenía que decir. Lo cierto que este irresponsable puso en jaque a toda la guardia policial y de salud de la Municipalidad, donde luego de las revisiones médicas aplicando el protocolo se pudo saber que “no tenía nada y que el personaje involucrado es una especie de persona con algún trastorno sicológico”.
Lo bueno de esta acción, a la que tuvo acceso EL SOL ABC, “es comprobar que todos los protocolos de vigilancia en Salta están fallando, tanto los de salidas como los de entradas de salteños o trabajadores de otras provincias como los transportistas, o gente que hace mantenimiento de empresas afincadas en Salta que deben salir. Se está comprobando que muchos están falseando permisos o truchando, para poder ingresar o salir, lo que conlleva un enorme peligro para la población estable”, dijeron profesionales de la salud abocados a los operativos de control por el Covid-19.
Mientras tanto, critican al gobernador Sáenz como a la intendenta Romero haber flexibilizado tanto y que no hagan los controles inmediatos y severos en los ingresos a la ciudad de Salta, porque muchos temen que “pase lo que pasó en Córdoba, que de la noche a la mañana se tuvo que volver a fojas cero”.
