BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Avispón Negro). Está iegando el nuevo “tren de la fantasía”, ia que la Patoneta ha sufrío tremendo reventón de gomas. Por eso nomás, la muy “querida” Patito se ha querío suicidar aier, cometiendo casi un crimen de lesa humanidad, al mezclar su Toribio diario con la Manaos, “pa’ rebajarlo”, habría dicho la petisita flequilluda, a quien peina la regordeta del comedor Los Píletones, muy amiga del “No se inunda más, carajo”.
Pero lo que más más m’ai llamao la atención es la aparición en el canal independiente de aveyaneda, La Nazión + Mentiroso –igualito que su propietario— los nuevos arcángeles de la derrota, como se les conoce ahora a Charuto Feinmann, Tortuga Ninja Negra Majul, Lechón Blanco Viale, Novanecio El Rosarino y Cordobita Granroña Rossi, que la siguieron a sol y sombra a la Patito, que anda más descangaiada que rana con brucelosis.
Es muy grande la desazón y la angustia entre los operadores a sueldo de “No se inunda más, carajo”, que entre eios hay miradas furtivas de desconfianza, ya que hasta ni se saludan. La única que guarda un gramo de esperanza, es la Dioxina Canosa, que también ha vuelto a hablarse con Peluca con Caspa.
Eia misma contaba a uno de sus aiegados: “Se nos jue la mano, con las operaciones contra el kerneresmo y parece que el pueblo se ha dao cuenta. Ya se los comenté a Charuto y compañía, que nuestros días están contados en este canal ‘independiente’ y que lo único que nos queda es apoiarlo con todo a Peluquita. Ya hay una especie de rumor, que ‘si queremos seguir trabajando’ va a haber una poda de sueldos del 50 %. Voy a tener que pedirle consejos a la Clérici pa’ ver cómo hago pa’ juntar tanta guita”, dijo la blonda artificial ex nuera del otrora gorila en las sombras, Tato Bores.
Finalmente, Charuto y sus amigotes han contratao un chamán misionero que les hace jugar al juego de “La Basurita”, antes de pasarles una serie de ungüentos antiTitanic. Dicen que por unos días no se pueden sentar. Pobres changos sufrir tanta humillación, de tan güenos que son. No se merecen tanto castigo.
