BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Seba Schwarcz). No hay ni necesidad que se la nombre. Está en el centro de la escena. No necesita publicidad, tanto que “los que no la quieren o fingen no quererla la ponen porque se quedan sin espectadores”. Cadena nacional a la fuerza.

Los otros copian, ella ya no necesita “sacar un libro”; hoy la estrategia es otra: hay que hablar de “proyecto de país”, mientras “los indignados for sale” están como esas “plantitas a las cuales les falta riego”, casi mustias, “los serruchos, la escofina, el formón” sacados de la irrealidad de YouTube fueron escondidos ante los ojos de una Capuchetti por demás obvia.

 

Tocó ella y puso énfasis en lo que les falta hacer, porque se siente parte, aunque la Tortuga Ninja Negra diga lo contrario, porque de eso vive: de mentirle a la gente, de mentirse a sí mismo, de mentirle a sus hijos, de mentirle a su conciencia. Pero él va hacia adelante, como el Maestro de la Dioxina Canosa, un gitano mercenario llamado Baby. Con sólo dos palabras los hace remover en sus tumbas virtuales, porque no hay con qué darle. Es espectacular, es inteligente, es linda, es experiencia, es como nosotros los simples que hacemos Patria todos los días.

También habló de un nuevo contexto, que tiene mucho que ver con el nuevo panorama internacional. Y hacia allí vamos, pero con otra mirada dándole lugar a la “Vaca Muerta que hoy está más viva que nunca, que gracias a que en el 2012 tomamos la decisión de estatizar YPF, pero hoy todos se relamen y es pan de sus mesas, pero jamás acompañaron en el Congreso”. Habló de la inclusión de la ciencia y de las nuevas tecnologías que pueden ser complementarias para todo lo que se viene en el nuevo proceso de “modelo de industrialización para el país”.

Cadena nacional con Cristina. (Foto: Resistencia Argentina).

Nosotros, sí nosotros. Nos pusimos muy contentos, porque la fuerza del compañero Lula le recargó las baterías de la ilusión. Y se dijo: ¿cómo él, que tiene 77 años tiene esa vitalidad y está a punto de poner de pie a un Brasil que todos los días es engañado por los medios y por los “pastores”, ha vuelto?, yo que tengo el armazón y el amor del pueblo peronista de mi parte ¿no voy a volver?

Y así, a todos nos dio una inyección tan fuerte, que se llama “esperanza”, que hoy hay una nueva brisa que lo inunda todo y que también tiene nombre: y se llama CLAMOR.