SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial-EL SOL ABC). Lo que pasa en Jujuy no es la obsesión del periodismo por denunciar por denunciar, sino porque el régimen de gobierno imperante rebasa todos los sentidos comunes de convivencia democrática y atenta contra las normas y leyes nacionales, además de afectar los derechos humanos de la mujeres.
El 8 de marzo pasado y ya el día lunes 9, todos los organismos del régimen jujeño salieron a hacer “marketing” con los consabidos presentes, actos y ceremonias en “honor a la mujer”, como el que realizó el ministro de Seguridad de la Provincia, Ekel Meyer, en sede policial, donde “homenajeó a la mujer policía”, mostrando su grado de “hidalguía y servicio a la comunidad”, según el mismo funcionario.
Lo intolerable de esa postura cínica de un régimen que se ha llevado por delante todos los derechos de las mujeres jujeñas, cuando desde un principio atentó y pisoteó los derechos de las mujeres “al encarcelar con artimañas y violaciones a las leyes a mujeres líderes sociales y con militancia política”.
En la ciudad de Libertador, la concejal electa por Unidad Ciudadana, Patricia Gutiérrez, fue perjudicada tanto ella como su familia, por un ataque frontal a su persona por funcionarios del equipo de gobierno del intendente Oscar Jayat, con pintadas, grafitis y trolls en las redes sociales para “mofarse de su persona y con mentiras sobre su actuación como funcionaria de gobierno”.
Otros casos aberrantes que los pone en evidencia
Son cómo las maestras de las escuelas de Jujuy son reiteradamente tomadas el pelo, cuando no se les atiende sus demandas salariales, mientras todos los funcionarios provinciales y municipales gozan de sobresueldos.
Luego salieron a realizar marcha paga –con militantes de todos los rincones de Jujuy traídos en ómnibus, lo mismo que criticaba a Milagro Sala— para “defender a la Justicia”, cuando existe una grave denuncia “contra el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Pedro Baca, por violación en contra de la directora de la oficina de Estadística y Censos de Jujuy, Juárez Orieta y que fue confirmada por la víctima con aportación de más pruebas en contra de Baca”.
A ello hay que agregar las denuncias de empleadas de la administración provincial contra Cabana Fusz y Lello Sánchez. Entonces, de qué estamos hablando Morales.
