SALTA (Especial para EL SOL ABC-InfoBaires24-Por Alejandra Paredes). Rompieron la ventanilla de su camioneta, mientras cenaba en el oligarca club 20 de Febrero de esta ciudad. Se trata de Francisco Lávaque, esposo de la intendenta de Salta, Bettina Romero.
A una semana para que la cambiemita, Bettina Romero, compita –otra vez– por el gobierno municipal, el hecho policial que involucra a su pareja, el fracasado empresario vitivinícola, Francisco Lavaque, personaje cuyos acreedores se vieron perjudicados por su declaración de quiebra.
La historia del hecho policial pone en público que Lávaque le debe a cada santo una vela, como se dice en Cafayate, donde tiene a su cargo la única bodega que generó más pérdidas que ganancias en el país, pese a las ayudas del Gobierno nacional a la producción e industria. El esposo de la macrista, Bettina Romero –hija del senador nacional Juan Carlos Romero-– y además, participantes de la empresa agroproductora y mediática Horizontes SA, dejó en la lista de acreedores, sin cobrar, a: “Farmacia de la Esquina”, uno de los tantos negocios cafayateños perjudicados por la imposibilidad de gestionar los fondos financieros, según detalla la prensa local, desde donde informan una nómina de víctimas entre las que figuran los trabajadores rurales de la bodega, quienes venían recibiendo el salario a cuentagotas.
También, se advierte que, entre los acreedores, figuran: “Despensa Tio Poli” lugar al que pedía crédito –fiado–, “Ferretería San Cayetano”, “Gomería Marquito”, “Soda Mónica S.R.L.”, “Mayorista Cafayate”, “Sindicato de Obreros Vitivinícolas” y “Micromotos, Mensajería Express”.
La empresa Félix Lávaque SA, bodega que elabora y vende los famosos vinos Quara, tiene una deuda de aproximadamente 200 millones de pesos, dinero que le debe a comercios y empresas de las que recibía servicios e insumos.
El marido
Francisco Lávaque disfrutaba de una cena el sábado por la noche en las instalaciones del club de élite, 20 de Febrero, la casona del Paseo Güemes a unas pocas cuadras del Monumento al Héroe Gaucho, en plena ciudad de Salta, cuando fue avisado que le rompieron el vidrio de una ventanilla, para cometer un robo.
La zona cuenta con cámaras de seguridad, patrullaje permanente, dispositivos de emergencia y todo lo que refiere a un espacio dedicado al turismo, siendo el área de las tradicionales familias salteñas oligarcas. Por tanto, el robo en este lugar, no es moneda corriente.
Le sustrajeron al quebrado empresario pariente de los Romero –de su camioneta Dodge Ram 2500s– una mochila en cuyo interior, según declaró a la policía Lávaque, una notebook marca Apple.
No obstante, testigos que salieron a ver el hecho perpetrado, le escucharon decir en una conversación telefónica, que le habían robado una cantidad considerable de dinero. La que no declaró a la Policía local, pero que fue el motivo primordial de sus lamentaciones.
