BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Como zorro vestido con traje de oveja, Florencio Randazzo transitó los diversos gobiernos del kirchnerismo y casi logra la hazaña que le había pedido su padre putativo Héctor Magnetto, ser presidente de la Nación para meter al holding directamente en Casa Rosada.
Ahora muchas cosas comienzan a tener real comprensión, cuando este ladino funcionario “le negó el saludo al entonces vicepresidente de la Nación, Amado Boudou”, o cuando Clarín lograba “primicias” que nadie sabía quién se las pasaba. Bueno, señores, era el Floro –como lo conocen en su entorno— el que “era el alcahuete directo de Magnetto” y así ponía en zozobra todo el ritmo de gobierno de la entonces presidenta Cristina Kirchner.
El medio que confirmó la noticia del “gran pase del año”, de Randazzo anotándose en las filas del macrismo, fue el diario Chivilcoy al Día, lugar de donde es el Floro y donde también tiene origen el dueño de Clarín. El estudio contable de Randazzo es el que le lleva las cuentas de los emprendimientos agrícolas en Chivilcoy a la familia Magnetto.
El portal Chivilcoy al Día publicó: “Florencio Randazzo confirmó por Twitter que se suma junto con Juan Schiaretti a Juntos por el Cambio por pedido de Horacio Rodríguez Larreta, en una jugada que genera tensión con Patricia Bullrich por lo que conformarán una gran PASO opositora”.
Los presidentes de los cuatro partidos que integran el frente opositor debatirán hoy la incorporación de esos tres dirigentes del “peronismo federal”, además de la de José Luis Espert y Margarita Stolbizer.
“El país necesita de radicales, peronistas, socialistas, liberales, hombres y mujeres del PRO y de todos los partidos con compromiso para trabajar en serio en cambiar esta dolorosa realidad”, explicó Randazzo en su último tuit.
De esta forma, se ve cómo Cristina tuvo que luchar y gobernar casi sola, con funcionarios poco fiables y que ahora “se muestran como hombres en contra de la grieta y de cuántos argumentos poco sólidos, ya que son los mismos que van a agacharse ante los borcegos del embajador de EE.UU. en la Argentina, Marc Stanley”, dicen muchos peronistas.
