SANTA FE: el delito que nace del narcotráfico es difícil de combatir por la fuerte contaminación de la Policía provincial con éste

Una mujer y un joven fueron baleados ayer, cuando quedaron en medio de una balacera entre bandas en la ciudad de Rosario. (Foto: Rosario.3).

SANTA FE (Especial-EL SOL ABC). El gobernador Omar Perotti sólo está en la tarea defender los intereses de los estafadores de Vicentin y de los sojeros que no quieren pagar y evaden impuestos mediante el contrabando o las falsas declaraciones juradas en el momento de embarque en los puertos rosarinos, mientras siguen los asesinatos a mansalva entre distintas bandas que luchan por seguir manteniendo “territorio”.

Ayer por la tarde informó Rosario3.com que “Rosario suma una nueva víctima producto de la violencia. Una mujer de 58 años perdió la vida al quedar en el medio de un tiroteo, presuntamente, entre dos vehículos. Además, la hija de la víctima, de 32 años, también resultó herida de gravedad. Además, quedó confirmado un tercer herido, se trata de un chico de 16 años”. El hecho ocurrió cerca de las 19, durante la tarde de ayer sábado, en inmediaciones de Isola y Maestros Santafesinos, zona sur de la ciudad. La mujer murió en el acto, tras recibir múltiples disparos en su cuerpo”.

A todo ello se suma lo que también informó Rosario3, en la mañana de ayer: “Durante la madrugada de este sábado, un adolescente de 16 años ingresó al Hospital Eva Perón, trasladado por móvil del SIES, con un disparo en la cabeza. Por estas horas, el joven se encuentra en grave estado. Al parecer, fue derivado del hospital Alberdi con diagnóstico de fractura de cráneo por caída en altura, con signos de intoxicación y una herida de arma de fuego, con el proyectil alojado en la cabeza”.

 

Sigue el delito

Mientras Perotti está en el juego de defender su “quiosco personal”, el delito continúa, porque es la Policía de Santa Fe la que está muy contaminada en todos sus estamentos y no se hace una verdadera purga. Mientras las fuerzas federales se exponen al riesgo de balaceras de bandas de narcotraficantes, los policías locales hacen “de espías e informantes de las mismas bandas que dicen combatir, porque en el tiempo de Los Monos todos los jefes policiales recibían cuantiosos bolsones con dinero malhabido para que liberaran zonas para cometer sus fechorías”. Y eso no se ha logrado desmembrar, al decir de voceros de las fuerzas federales.

Efectivos de la PSA en uno de los últimos allanamientos en uno de los aguantaderos narcos en el centro de la ciudad de Rosario. (Foto: Prensa PSA).

Una de las fuerzas federales de más prestigio en el combate del delito, es la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que en uno de sus últimos informes detalló algunos datos que infieren que la Policía santafesina está muy contaminada.

En el mes pasado, por ejemplo, la PSA informaba que “la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que depende del Ministerio de Seguridad de la Nación a cargo de Aníbal Fernández, desarticuló a mediados de junio una organización criminal dedicada al comercio y distribución de estupefacientes que operaba en el macrocentro de Rosario (Santa Fe). Mediante 21 allanamientos en la provincia santafesina (19 en Rosario, uno en Alvear y otro en Pérez), los oficiales de la fuerza que conduce José Glinski detuvieron a 18 personas –entre ellos un efectivo de la Policía de la Provincia de Santa Fe–, y secuestraron cocaína, marihuana, metanfetamina, ketamina, dinero en efectivo, armas, vehículos, celulares y otros elementos de interés”.

Durante la investigación, que comenzó hace dos años, se pudo establecer cómo se conformaba esta red criminal y cuáles eran sus lugares de acopio, métodos de distribución y venta de drogas. Se identificaron a varias personas con distintos niveles de responsabilidad (proveedores, distribuidores, vendedores al menudeo), entre los que se encontraban al menos tres personas que integraron la banda narcocriminal de Ignacio “Ojito” Actis Caporale, desbaratada por la PSA en 2012.

Una de las principales cabecillas resultó ser una mujer que se trasladaba en el radio céntrico de Rosario a bordo de un vehículo y, siempre acompañada por algún colaborador, se reunía con distintas personas para realizar maniobras de venta y distribución de drogas.

Como resultado de los allanamientos, los oficiales detuvieron a 13 varones (entre ellos hay un policía) y cinco mujeres (una de ellas con arresto domiciliario). Además, incautaron 808 gramos de clorhidrato de cocaína; 3.351,5 gramos de marihuana; seis plantas y 84 semillas de cannabis; 66 pastillas de éxtasis; siete frascos de metanfetamina líquida; un frasco de ketamina; cuatro instalaciones para cultivo en interior, seis balanzas y elementos de corte. Secuestraron 1.130.946 pesos; 8.600 dólares; 4.550 euros; dos máquinas contadoras de billetes; nueve autos y dos motos; tres armas de fuego y 172 municiones; 66 teléfonos celulares, 10 notebooks, entre otros dispositivos electrónicos y documentación de interés para la causa.

Intervinieron la Fiscalía Federal N° 2 de Rosario, a cargo de Claudio Kishimoto, y el Juzgado Federal N° 3 de Rosario, de Carlos Vera Barros.

Muchos creen que el delito continúa porque a pesar de la llegada de todas las fuerzas federales, es la Policía de la Provincia de Santa Fe un verdadero obstáculo para la erradicación definitiva de bandas y sicarios que operan en esta ciudad, que los gobiernos socialistas de Hermes Binner, Antonio Bonfatti y Miguel Lifschitz no tocaron y dejaron que el delito proliferara en los términos peligrosos en que hoy en día se puede ver.