ROSARIO, Santa Fe (Especial-EL SOL ABC). Con lo que le está ocurriendo al río Paraná es una alerta definitiva para gobiernos, entes privados, empresas y pueblo en general, que deben tomarse urgentes medidas en torno de los monocultivos y de la deforestación desenfrenada en provincias como Santa Fe, Santiago del Estero, Chaco, Corrientes, Salta, Formosa y Misiones, porque recientes informes de centros de seguimiento del cambio climático están informando que “esto lo que viene es de mal en peor”.
Varios sectores piden al ministro Cabandié, que desde el Gobierno se agilicen leyes para una protección muy fuerte sobre la flora y fauna en las regiones de las grandes cuencas hidrográficas argentinas y que también los embajadores en Brasil, Bolivia y Paraguay pongan el foco en el medio ambiente sobre las cuencas de los ríos Paraná, Paraguay, Uruguay e Iguazú en sus reuniones con los funcionarios de los Gobiernos donde actúan.
Desde el Servicio Meteorológico Nacional se dijo que “se espera una situación espejo con lo que pasa actualmente en el hemisferio norte, donde vastas regiones de Europa, principalmente costeras al mar Mediterráneo están sufriendo altas temperaturas que rozan los 50 °C, como por ejemplo la región de Sicilia. Lo mismo que sucede en EE.UU. y Canadá, que además sufren graves incendios forestales”.
Por ello, muchos organismos de defensa del medio ambiente, como Greenpeace, Vida Animal, Salvemos al Paraná, están poniendo el foco en la tremenda deforestación a la que se ha sometido sin ningún plan de resguardo a la gran Llanura Chaqueña, que abarca precisamente Chaco, Formosa, Salta, Santiago del Estero y norte de Santa Fe.
También se hizo saber que se debe cuidar el agua y no utilizar más de lo que conviene, a pesar que se tenga en grandes cantidades.
