Tras los reparos puestos por el gobierno francés, los productores de carne vacuna se quejaron de la doble vara de las autoridades comunitarias.
Esta vez, unos 3 mil ganaderos se quejaron por la doble vara de las autoridades comunitarias, que exigen fuertes normas medioambientales a los agropecuarios europeos pero quieren dejar ingresar carne de países con normativas menos restrictivas.
Según informó Euronews, los reparos al ingreso masivo de carne sudamericana también es compartido por los productores españoles, italianos, polacos y franceses.
Por eso, los ganaderos marcharon hasta el Parlamento irlandés y amontonaron botas embarradas en la puerta del edificio como símbolo de la protesta contra el acuerdo.
El acuerdo, cuya negociación duró 20 años, cubre mercados que suman aproximadamente 780 millones de consumidores, lo que representa una cuarta parte del PIB mundial.
Por su parte, París puso como condición para dar luz verde que los países del Mercosur respeten el Acuerdo de París sobre el cambio climático al tiempo que fijó condiciones sanitarias y de salvaguarda para proteger el campo francés.