BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Avispón Negro). Como estoy aislao en la casa de mi compadre Abdala, cerca de la cancha del River de la Arañita Gallardo, en el barrio de Núñez en la Capi, porque no quiero traer la cepa de Manaos con fernet pa’ Libertador, es que mi’puesto a ver toda la grilla de programa humorísticos-políticos referido a la pandemia, que me distraen de mi tristeza de estar lejos del pago. Con decirle que “extraño la picadura de los mosquitos del chikungunya y del zika de mi norte querido”.
A falta de mi flaca la Juani, me entretengo hablando de la pandemia con mi cumpa el “Turquito” Abbala, quien es bien amigo del Burrito y que m’ai dicho que me va llevar visitarlo, porque vive en un barrio cerrado.
Y hacienzo zapin la veo a la Canosa, con su histeriquismo a cuestas, donde no sabe qué preguntar a sus entrevistaos para hacer un punto menos de reitin, porque eso es lo que más sabe. Que es correr a sus televidentes, porque aburre que no haga un periodismo más comprometío como el que hace la Majulita, que está venido a menos porque ya el D’Alesio ese está metío en cana y la Majdalani esa está por poner un shopin en Miami Dade.
Más lueguito me doy con lo que descubrió el chango Navarro, aquel que le dejo al Baby con la pelada llena de pupos, cuando se peliaron en los pasillos de la Radio 10, que “más de 75 mil porteños viajaron a distintos municipios del Conurbano como de la Provincia de Buenos Aires, creyendo como la Yanina Latorre, que vacunarse ajuera es vacunarse en Miami”, que está de moda desde que la ganadora del Master chef le hacía la guita al Diego vendiendo depas por su cuenta, según le contó Morla (cos) a mi cumpa el Turco.
Dicen que los porteños son así porque sufren contaminación cerebral de tanto cemento y hormigón armado. Es que vivir encerraos en departamentos de 2 x 2, pone loco a cualquiera y son los que más se oponen al traslado de la Capital Federal a otras ciudades del interior como lo sugirió nuestro Dire.
Y no quiero averiguar más, porque de seguro es que me doy con que el Pelao Larreta también a vacunao a su prole en el Conurbano. Ahí sí que a la Bullrich se le descuajeringa la bombacha que es como una carpa de circo, según cuentan sus vecinos en el edificio donde vive, que con largavistas la tienen junada hasta cuando va al baño la mentirosa que no cree en el Covid.