INMEMORIAM: A Ely con todo el amor del mundo, de parte de su familia

Por siempre, nuestra querida Ely!!

MORENO, Buenos Aires (Especial para EL SOL ABC). Desde EL SOL ABC compartimos el dolor por la partida a los brazos del Señor de Elizabeth Castro Rivera, sobrina de nuestro Director.

 

ELIZABETH CASTRO RIVERA (Q.E.P.D.). No hay palabras para mitigar el dolor de la familia Castro-Rivera por la partida hacia los brazos del Señor de su hija dilecta Elizabeth, que a los 41 años dejó un vacío imposible de llenar.

Cada uno hace sus duelos personales a su manera, pero nuestra Familia lo hace compartiendo con quienes la conocieron y supieron de los valores que como hija, hermana, tía, sobrina, nieta y amiga supo tener Ely, para todos. Por ello pedimos a cada uno de Uds. Elevar una oración en su memoria, para que por su intermedio podamos recibir bendiciones de salud y bienestar en el seno de nuestras familias.

Ese pedido es hecho por sus papás Julio y Senovia; sus hermanos Martín, Gastón y Maximiliano; sus hijitos queridos, su Esposo y Flia; su abuelita Téofila; sus tíos Luis, Eva, José y Rubén; sus primos Noelia, Cristian, Marcos, Adriana, Fabiana, Héctor, Romina, José y Lucas; y desde la Ciudad de Mendoza, su abuela Alicia y su tío Víctor Fabián.

 

Palabras personales

En su despedida física Maximiliano, su hermano, le dedica estas sentidas palabras:

A tu lado, siempre

Todo comenzó un lunes de junio

la magnitud de la ruptura tardó 24 horas en digerir.

Cuando se hizo martes y fue de noche,

los fantasmas de la ausencia empezaron a adueñarse de todo.

Mientras se desintegraban los sueños

se multiplicaban los fantasmas,

la risa como cosa del pasado,

el llanto, lluvia desbordada,

aprender a vivir en compañía

fue negarse a vivir en soledad.

El aire se hace denso,

los días se hacen largos

y las noches son infiernos de insomnio y melancolía.

Tantos días,

tantos meses

y sólo aquel día de fecha cualquiera

marcó el principio de un final en pausas.

Ese día empezó, lo que terminaba.

Estas son las últimas palabras que te escribo, te voy a recordar siempre mi negra linda.

Perdón por alejarme, por no verte sufrir; siempre te voy amar y algún día nos encontraremos y nunca más me vas a dejar, cuidaré de tus hijos como vos lo hubieras hecho.

Gracias por ser la mejor tía que mis hijos pudieron tener; siempre te recordaremos.

Cuídame a los viejos y dales fuerzas para seguir.

Toda tu familia te extrañará; sólo nos queda recordarte como la gran persona que fuiste. Adiós hermana.

Te amo Ely

Por siempre, nuestra querida Ely!!