SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial-EL SOL ABC). Al revés de lo que ocurre en la provincia de Salta, donde sus autoridades provinciales quieren reformar la Constitución Provincial para acortar los mandatos de los gobernantes, en Jujuy se va en sentido inverso, porque el jefe del régimen local, Gerardo Morales, apuesta a la baja participación de la población en las elecciones parlamentarias de medio término, y por ello presionó para que las elecciones se adelantaran en medio de la pandemia.
Con ello, dicen los especialistas, tendría asegurado el triunfo y lograría la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados de la Provincia, que es unicameral, “para dar lugar al proyecto para la elección indefinida del gobernador y vice”. De parte del oficialismo, certifican a medias estas opiniones, dando por seguro su triunfo provincial.
Desde la oposición, sin embargo dudan de esta postura, y apuntan a “sincerar las propuestas hechas por el oficialismo, que de la mano de Morales, ha conculcado los derechos constitucionales de los jujeños, con un Poder Judicial que Morales maneja a su amplia disposición, logrando que el famoso ‘lawfare’ (Justicia que mete presos a opositores) y con una economía, que no ser por la ayuda del Gobierno nacional, hoy Jujuy estaría inmersa en una profunda crisis económica y social, mucho peor que en la década de los años 90. Además, de un perjuicio económico casi a eternidad por el feroz endeudamiento sometida a la Provincia, por casi 1.800 millones de dólares, para cambiar la matriz productiva de Jujuy, cuando los únicos que cambiaron su matriz económica y comercial son los hijos, parientes y amigos de Gerardo Morales, y de todos los macristas que se encuentran agazapados en Casa de Gobierno y en los distintos ministerios provinciales”.
Por ello, creemos desde EL SOL ABC, que “la participación debe ser masiva, con los cuidados y respetando los protocolos establecidos para la pandemia, para que de una vez por todas vuelva a Jujuy la organicidad, la vigencia plena de la Constitución Provincial y Nacional, con una Justicia independiente del poder de turno y con la investigación del manejo de los millones de dólares por parte de Gerardo Morales y sus funcionarios, toda vez que la obras que muestran en ningún momento tienen equiparación ni fundamento con la deuda en dólares originada. Debe dársele un tate quieto y mostrarle que con el pueblo no se jode”.
