BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Sindicado como el proveedor número uno de las bandas locales dedicadas al narcotráfico, el boliviano José Adalid Granier Ruiz tenía pedido de captura de la Justicia federal de Salta, ya que se comprobó que sus avionetas pululaban campos de la zona de Anta y Metán en Salta, pero también en campos de la zona de los departamentos San Pedro y Santa Bárbara, manejados por el narco jujeño conocido como “Tomate” Lezcano, casi en el límite con la provincia de Salta.
Granier Ruiz fue detenido en Brasil, en una finca que regenteaba en Jaraguarí, en la zona de la región conocida como Campo Grande, junto a su amante y su chofer al comando de una 4×4 Toyota Hi-lux de última generación. Se vio sorprendido en un control de ruta por la Policía Vial brasileña, cuando acababa de salir de su escondite en la mencionada finca, y se les pidió los documentos. Al revisar la documentación, detectaron que la misma era falsa y es allí que se lo detiene y se pide antecedentes a Interpol. Allí surgen los datos de sendos pedidos de distintas fiscalías argentinas, entre ellas las de Salta y la última de Rosario, tras el triple crimen narco en un casamiento, donde apareció la huella de Granier Ruiz, porque en uno de los teléfonos de los fallecidos apareció agendado el boliviano, originario de la zona de El Beni.
Un negocio lucrativo
Este Granier Ruiz primero comenzó a trabajar en el campo junto a su familia, que empezó a comprar aviones usados para hacer transporte de carne vacuna hacia los grandes centros de consumo de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz. Ya luego se independizó comprando avionetas para hacer de taxi aéreo hacia las grandes urbes bolivianas. Es allí que ve que el mejor negocio no es transportar gente sino droga. Y así se llega a la conexión con los narcos santafesinos, a quien se cree que este Granier Ruiz mandó a matar “porque no habían pagado un embarque de droga”.
De acuerdo a los datos surgidos de la investigación de la Fiscalía Federal de Salta, este Granier Díaz tiene propiedades residenciales en Salta, Salvador Mazza, Tarija, Yacuiba, Santa Cruz de la Sierra, San Borja en Bolivia y en Brasil.
El portal Infobae también publicó que “Según los agentes que lo investigaron, Granier proveía de cocaína a Ignacio Quintana y Fabián Gustavo ‘Calavera’ Pelozo, quienes serían los proveedores de Giménez, asesinado junto a su pareja y a su hija, el 29 de enero de 2022.
’’Ese día, habían asistido a la boda de Esteban Enrique Rocha, alias ‘Pinky’, y Brisa Milagros Leguizamón Ferreyra, los novios fugitivos que fueron capturados en enero pasado, en Asunción, Paraguay.
’’Quintana y Pelozo fueron detenidos en marzo de ese año, están acusados por el transporte de 389 kilos de cocaína, junto a otra figura clave en el esquema narco argentino: Adelaida “La Tía” Castillo, una ex bagayera de Salvador Mazza que escaló hasta convertirse en la “reina narco”, el alias que se ganó en el norte argentino.
’’La complejidad que revistió la trama del triple homicidio motivó la creación de un equipo especial de fiscales liderado por el fiscal Luis Schiappa Pietra, e integrado por Gastón Ávila, Matías Edery y José Luis Caterina, quienes trabajaron en coordinación con sus pares del fuero federal”. Es allí que se dan las primeras conexiones de los narcos detenidos con el narco boliviano, Granier Ruiz. Un sujeto realmente peligroso.
