CARTA A FERNANDO ESPINOZA: compañeros de La Matanza piden por Pamela Scardino, que está en situación angustiante

Hoy la compañera Pamela Soledad Scardino necesita que la escuchen, por lo menos. Porque desde EL SOL ABC sabemos de cómo ha defendido este proyecto político. Su carta es directa y llana, por eso la apoyamos. (Foto: PSS-Redes).

LA MATANZA, Buenos Aires (Especial-EL SOL ABC). Tantos casos como los que vive Pamela Soledad Scardino en esta localidad del Conurbano bonaerense se repiten en todo el país. Pero es esta joven mujer militante, de la que damos fe, que pasa por problemas de salud y económicos la que necesita que el intendente de la ciudad de La Matanza, Fernando Espinoza, la escuche y le tienda una mano.

Ante esta situación, compartimos la carta pública de Pamela que, junto a sus hijas, escribió con el corazón en la mano lo siguiente:

“¡Hola Compas! Necesito ayuda, cobro el 17 la asignación de las nenas (8 mil pesos. Comiendo nada llegamos hasta hoy). Siguen sin comunicarse de Desarrollo Social de acá de La Matanza. Sigo insistiendo con el ministro Daniel Arroyo, que dice que va hablar con Desarrollo de La Matanza; así se pasan la bola uno a otro.

’’También le pedí trabajo.

’’Además en La Matanza en el municipio tengo puntaje del Consejo Escolar, además de trabajar en otros sectores, tampoco. Hablé con todos; me conocen, están acá de contacto ni bola, pero claro cuando los milité (las fotos están mi perfil de Facebook) servía. Tengo 3 nenas, yo nací en La Matanza, mis hijas también y no logro –desde hace un año va hacer en marzo– que me den una respuesta.

’’Me fui por las ramas, lo sé. Pero ya está situación además de avergonzarme y relajarme para que puedan comer las nenas, me genera impotencia, bronca, dolor. (No lo digo por los cumpas) si por el municipio y todo el equipo de Fernando Espinoza y allegados.

’’El otro día siendo víctima además de violencia de género, también todo parado en los juzgados y fiscalías de La Matanza.

’’Un compañero me ayudaba, pero empezó a tratar mal a mis hijas.

’’Este es el precio que pagamos por no tener un trabajo, ¡qué me lo deben! Fernando Espinoza me conoce y siempre que hemos hablado en persona en actos y demás me ha incorporado. Pero sus secretarios/as tienen que decir que “está reunido”. Lo sé, porque también fui secretaria de Fernando.

’’Sacando la bronca y demás, quien ‘pueda con lo que sea se los agradezco muchísimo’.

’’No sé cómo seguir, porqué es imposible llegar a fin de mes con 8 mil pesos, más los aumentos, mis hijas no comen carne, frutas nada que tenga vitaminas. Y estos funcionarios después se sacan fotos con niños para las redes, o sólo ayudan a algunos.

’’No sé qué pensar.

’’Estoy pidiendo trabajo y sé que hay; yo trabajé, yo sé cómo es la cosa, estuve en el Ejecutivo, manejé agendas de muchos.

’’Perdón y gracias.

’’Pido por mis hijas, si estuviera sola todo sería diferente.

’’¡Cómo les explico funcionarios que esto que escribo acá cuando lloran de hambre a tres criaturas! A mí, me pueden decir ‘esperá’, lo que sea, yo lo banco.

’’¿Pero ellas? ¿Realmente piensan en los niños? Porque veo muchas fotos de ser solidarios (?)

’’¡No puedo más!

’’Gracias a los compas que me ayudan y no están en la función pública, como los que deberían ocuparse realmente y no tener la puta necesidad de hacer esto y joderlos. Ya sé que no soy la única que la estoy pasando mal.

’’¡A quien pueda mil gracias! No sé qué más hacer, decir.

’’Tengo mucha bronca.

’’Estado ausente completamente”, termina su carta Pamela Scardino, del municipio de La Matanza.

Por ello creemos que se debe y puede crear, por parte del Estado, un Plan Nacional de Trabajo, como lo que ordenó Joe Biden a sus ministros en EE.UU. para incorporar en poco tiempo a más de 20 millones de personas en situación de emergencia. En esta situación de pandemia es el Estado el que debe dar respuestas urgentes: crear brigadas de hombres y mujeres para limpiar las rutas nacionales y provinciales; un plan nacional de reforestación, de rutas y caminos; creación de supermercados directamente con los productores chicos y medianos, para ser los que directamente manejen los precios de alimentos y aditamentos; creación de brigadas, con asesoramiento, para hacer frente a las próximas pandemias, etc. Sólo hay que mover el frasco.