BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Seba Schwarcz). ¿Por qué en países como Bolivia, Brasil, Paraguay o el mismo Uruguay la fluctuación del dólar no tiene incidencia en la vida económica de los mismos? Porque las elites de esos países vecinos: primero, tienen sentido de pertenencia; segundo, existe una burguesía, en su gran mayoría, que cree que no puedes estar serruchándote el piso en el barco que vos mismo viajas.
Pero, además, la República Argentina es el bien más apetecido por los grupos de poder extranjeros, que desde las invasiones inglesas en 1806 y 1809, luego Francia en conjunto con Inglaterra intentaron de apoderarse de territorio argentino, que luego la corona británica logró en 1833 cuando usurpó las Islas Malvinas. Es la ubicación estratégica y su gran potencial de recursos, lo que convierten al país en zona exclusiva de refugio y provisión para las próximas catástrofes ambientales que sufrirá el planeta.
Además, se ha comprobado un “aceitado engranaje” de una perversa maquinaria que se nutre, de economistas, periodistas económicos, asesores y consultores financieros, que ejercen fuerte lobby sobre los medios de comunicación para que “la noticia de la suba (principalmente) sea noticia corriente en todos los medios para presionar al Gobierno para una devaluación”. De esto se nutren como amebas y de paso cobran sus sueldos, todos estos zánganos peligrosos para el resto del país. Estos avatares se hallan principalmente instalados en Capital Federal.
Si esto no se difundiera o no se replicara
¿Qué pasaría si los medios no difundieran, o se le diera poca importancia a la suba y baja del dólar, sea verde, azul, rosado, marrón o rojo bermellón? Todos los avatares, tanto especuladores como alcahuetes de turno, no tendrían razón de ser; o tendrían que agachar la cabeza para conseguir trabajos “más sacrificados” finalmente. Por ello, el continuo taladrar desde las primeras horas de la mañana, en todos los medios. La situación es que al mediodía de tanto machaque tú tengas ganas de irte del país, mientras estas ratas malignas siguen haciendo pingües negocios en la City porteña.
Varios sicólogos explican este peligroso síndrome de “la profecía autocumplida”, cuando dicen que “tanto te la repiten, que vos sin necesidad sales a comprar o a buscar dólares”. Y así te han drenado la cabeza, que ya no puedes dejar de sucumbir ante la tragedia: en ello va la inflación, que se come tu sueldo todos los días.
Es allí que faltan políticas severas y fuertes contra estos zánganos especuladores que están al servicio de poderes foráneos que quieren que Argentina nunca alcance las metas de bienestar y evolución, porque saben que eso la hace más independiente y soberana. Por ello, se oponen a que el Gobierno termine el gasoducto Néstor Kirchner, que va a ser una de las primeras llaves para dejar de depender de los dólares de la oligarquía agraria.
Para tener en cuenta
En 2015, la investigadora y catedrática de la Universidad de San Andrés –institución al servicio del establishment económico local— Rocío Martínez Scarinci, ponía al descubierto el “porqué de la creación del dólar blue”, en una tesis titulada “Mercado del dólar blue en Argentina: factores determinantes de un nuevo activo financiero” que luego publicó ese mismo año. [1] En la misma decía en el prólogo: “Se construye para tal fin un modelo autorregresivo con variables financieras que se mueven en la misma frecuencia y que podrían competir en rentabilidad y funcionalidad con el tipo de cambio paralelo, encontrándose que solamente el dólar oficial y el dólar contado con liquidación ayudan a explicar cerca del 25% del movimiento del dólar paralelo. Es decir, ni las tasas de interés ni los retornos de commodities ni los retornos del equity o de los bonos están vinculados en el muy corto plazo al precio del dólar informal, indicando que las fluctuaciones en el precio de adquisición de la moneda estadounidense por este canal es solamente un sustituto imperfecto de otras vías alternativas de adquisición de moneda. Asimismo, una vez separados los posibles efectos de las variables fundamentales, se estudian los residuos del modelo explicativo vía modelos autorregresivos para determinar si la dinámica de los mismos permite conjeturar la existencia de comportamientos de manada en dichos mercados. Los resultados son en este sentido ambiguos dada la fuerte presión de la demanda sobre el dólar. Por un lado, cuando la moneda estadounidense sufre una apreciación significativa en un día cualquiera, el día siguiente experimenta otra apreciación significativa no explicada por los fundamentals; lo que es compatible con el comportamiento de manada o de burbujas especulativas. Pero por otro lado, cuando el dólar experimenta una baja fuerte en un día, al día siguiente también experimenta una apreciación importante, hecho compatible con el comportamiento clásico de un consumidor que incrementa la demanda de un bien cuando cae su precio. El trabajo presenta tres aspectos innovadores: considerar al dólar como un activo financiero más que como una variable que equilibra la economía, analizar el comportamiento del tipo de cambio para en el alta frecuencia y analizar al herd behaviour como un comportamiento posible en la explicación de la dinámica del tipo de cambio informal en el corto plazo”.
Allí Martínez Scarinci dice claramente en la Introducción del documento publicado: “ ‘El dólar vuelve a ser el refugio preferido’, describe un título del diario La Nación con fecha del 15 de abril de 2011. El artículo, como muchos otros publicados con fechas similares, resalta el crecimiento de un mercado de tipo de cambio ‘en negro’ o ‘sin papeles’ (que luego se denominaría dólar blue, cuya existencia comienza en 2010”.
Véase la fecha de la introducción en la conciencia de todos los argentinos –porque no había forma de torcerle el brazo para una devaluación al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en ese 2010 y que se venía preparando fuerte para su reelección en 2011–, del famoso “dólar blue”.
Por estos días se ve cómo el establishment especulador, donde se nutren y retroalimentan, sojeros, evasores, elusores, asesores y consultores y seudos periodistas, también ha creado el “dólar crypto” o el “dólar por las dudas”.
El día que los periodistas nacionales y al servicio de la Patria dejen de ser parte de todo este guiso armado por los focus group al servicio de EE.UU., otro será el cantar y serán parte de la otra liberación que necesitamos.
Referencia:
