BOLIVIA: contundente triunfo del MAS, pero de forma extraoficial; mientras ya hay presiones para condicionar al binomio ganador

Los ganadores de las elecciones en Bolivia. Uno, directo que es Luis Arce; el otro, indirecto, que es Evo Morales, que de confirmarse oficialmente en Bolivia, podrá regresar a su país con la frente en alto. (Foto: Archivo).

LA PAZ, Bolivia (Especial para EL SOL ABC-Por Negri Antelo). Puede considerarse de histórica la jornada del día de ayer, donde millones de votantes se acercaron desde primeras horas de la mañana a emitir su sufragio en las distintas escuelas habilitadas por el Tribunal Superior Electoral (TSE).

Según datos preliminares por consultoras pagadas por el MAS y otros privadas, el triunfo de Luis Arce Catacora sobre Carlos Mesa Gisbert, de Unidad Ciudadana, ronda entre las bandas de los 20 a 25 puntos, según las empresas analistas de comicios que hicieron un relevamiento “a boca de urna”. En estos números dados a conocer a la prensa luego de los comicios, se infiere muy claramente que Arce aventajó cómodamente a Mesa, con un 52,2 % a 31,1 %. Este resultado también fue confirmado por el canal de noticias ruso Russian Today (RT).

 

Todo tipo de tropelías

Desde el sitio Resistencia.bo se hizo saber que el viernes pasado renunció toda la cúpula del Banco Central, Armando Pinel, José Gabriel Espinoza, Walter Morales y Roger Banegas, quienes deben ser investigados por “no cumplimiento de sus deberes como funcionarios públicos, malversación de fondos públicos y falsedad de documento público”, toda vez que distintos medios nacionales como internacionales denunciaron “el vaciamiento de las arcas del Banco Central”.

La corrupta cúpula directiva del Banco Central de Bolivia, que renunció 48 hrs. antes de los comicios. (Foto: Resistencia.bo).
Este es el súper ministro de Áñez, Arturo Murillo, que según versiones tendrían todo para huir de Bolivia. Lo mismo lo están haciendo varios personeros o agentes del régimen que propició el golpe de Estado. Entre ellos, Fernando Camacho y José Luis Pumari. Uno del departamento Santa Cruz, y el otro del departamento Potosí. (Foto: Resistencia.bo).

También desde Twitter la ex ministra Montaño, ahora refugiada política en Buenos Aires, denunció “los constantes desmanejos y corrupción en la cúpula de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que desde la asunción del régimen de facto de Jeanine Áñez se han realizado cambios inconsultos de ejecutivos como la contratación indiscriminada de empleados y ejecutivos”, causando un tremendo desequilibrio en las arcas de la empresa estatal.

Lo mismo hay más de 20 denuncias de corrupción, que de oficializarse el triunfo del MAS éste debe investigar además de “la masacre de El Alto, la masacre de Cala Cala en Cochabamba”, la dilapidación de fondos públicos por parte de Presidencia de la Nación, con Jeanine Áñez a la cabeza. Un siniestro personaje surgido por aprobación de EE.UU. que no estuvo nunca preparada para gobernar.

 

Un silencio sospechoso

El pueblo todo espera que en las próximas horas se pronuncie el TSE, que está siendo muy cuestionado por haber ordenado que “no se dé a conocer ningún conteo oficial de los comicios”, poniendo en duda su trabajo, más cuando también hubo polémica en el ingreso de veedores argentinos, cuando subrepticiamente se trató de detener y enviar a algún sitio desconocido al diputado por la Ciudad de Buenos Aires, Federico Fagioli, que era parte de la delegación argentina que fue hostigada y maltratada en el aeropuerto internacional de El Alto por funcionarios de Migraciones y por efectivos de la Policía Militar. Luego el régimen de Áñez tuvo que retroceder, ante la presión de la Cancillería argentina.

Finalmente, “intermediarios y agentes” de la Embajada de EE.UU. en esta ciudad, están tendiendo “puentes”, para conversar “amigablemente” con Luis Arce, especialmente del tema del litio del Salar de Uyuni. Sobre estas reuniones debe centrar sus ojos el pueblo boliviano, porque de alguna manera “se pretende condicionar al nuevo Gobierno”.