BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Hay que decirlo, este clásico del fútbol argentino y ahora puesto en la Libertadores, entre Boca y Racing es un opiáceo total. No hay buen juego, no hay variantes de juego, sólo ganas y a correr como locos, pero que los lleva a chocar contra el frontón del frente. Veintidós “picapiedras” preparados para dar y recibir, pero que al espectáculo deportivo no le aportan nada. Y el resultado no podía ser de otra manera: un 0 para cada uno.
Y no se le puede exigir mucho a esta “selva de troncos”. No sé quién les puso en la cabeza que Almirón o Gago son buenos técnicos. Son dos resultadistas, que apuestan a desmejorar cualquier partido. A defender y a correr como perros galgos sin ningún propósito. Y si desde el lado contrario hacen lo mismo, vamos a ver a 20 jugadores de metegol tratando que el otro no llegue. Quizás, por ello River marca la diferencia con el resto. Y para colmo lo traen a Cavani, que más está para hacer una cola en el ANSES que jugar como lo sabía hacer en Europa o en la Selección de Uruguay.
No hay que entusiasmarse mucho, que en Avellaneda se repetirá el bodrio y el hastío. En algún momento los “lúcidos” del fútbol tienen que convencerse que tienen que convocar a los Bochini, Riquelme, Trobbiani, Maradona, Capria o los Romagnoli, para darle vida y más espectáculo a la gente que va a una cancha para ver buen fútbol, que lo demás llega por añadidura.
Lo que fue el partido
Un poquito fuera del resto, es el Colorado Barco, que intenta crear, pero los árbitros no lo cuidan, tanto que el Picapiedras Rubio de Racing lo sacó del partido luego de entrarle con los tapones de frente a sus tobillos y uno de ellos, dijo basta y no le permitió seguir. Peor para el partido, que quedó a la resolución de los otros 10 picapiedras que poco pueden hacer porque no tienen creatividad.
Un tratamiento aparte es para Marcos Rojo, un jugador malintencionado que tiene en el mate que “hay que hacerse respetar en un campo de juego” y por eso aplica codazos y patadas arteras. “Estas equivocado, chamigo”, le diría un correntino. “Tu lugar es un potrero, pero lleno de burros”. Si no cambia, le va a perjudicar mucho al equipo de la Ribera.
BOCA JUNIORS
1
Romero
15
Nicolás Valentini
6
Marcos Rojo
(65′)
4
Jorge Figal
36
Cristian Medina
8
Guillermo Paul Fernández
(93′)
18
Frank Fabra
17
Advíncula
(65′)
21
Ezequiel Fernández
(65′)
10
Cavani
19
Valentín Barco
(47′)
BANQUILLO
7
Exequiel Zeballos
(65′)
2
Roncaglia
13
Javier Hernán
11
Lucas Janson
(65′)
42
Lucas Blondel
16
Miguel Merentiel
(47′)
49
Jorman Campuzano
9
Benedetto
(93′)
25
Bruno Valdez
3
Marcelo Saracchi
5
Ezequiel Bullaude
57
Marcelo Weigandt
(65′)
RACING CLUB
21
Gabriel Arias
3
Gabriel Rojas
33
Gonzalo Piovi
38
Tobías Rubio
(45′)
30
Sigali
23
Nicolas Oroz
(75′)
11
Jonathan Gómez
29
Aníbal Moreno
26
Agustin Ojeda
(92′)
7
Hauche
(62′)
15
Maximiliano Romero
BANQUILLO
13
Matías Tagliamonte
47
Ignacio Galván
34
Facundo Mura
37
Baltasar Gallego
48
Insúa
4
Pillud
22
Agustín Almendra
(75′)
35
Santiago Quirós
(92′)
16
Gastón Martirena
(45′)
Juan Quintero
(62′)
CAMBIOS
Gastón Martirena (45′, Tobías Rubio), Miguel Merentiel (47′, Valentín Barco), Juan Fernando Quintero (62′, Gabriel Hauche), Marcelo Weigandt (65′, Luis Advíncula), Lucas Janson (65′, Ezequiel Fernández), Exequiel Zeballos (65′, Marcos Rojo), Agustín Almendra (75′, Nicolás Oroz), Santiago Quirós (92′, Agustín Ojeda), Darío Benedetto (93′, Guillermo Fernández)
TARJETAS
Arbitro: Wilton Pereira Sampaio
Arbitro VAR: Wagner Reway, Igor Junio Benevenuto
Marcos Rojo (21′, amarilla) Tobías Rubio (47′, amarilla) Miguel Merentiel (51′, amarilla) Agustín Almendra (78′, amarilla) Guillermo Paul Fernández (89′, amarilla).