SARAPURA, UNA ORIGINARIA QUE VENDIÓ SUS CONVICCIONES: primero traicionó a la Tupac y hoy millonaria, junto a Félix Díaz, negocia tierras para multinacionales inmobiliarias

Dos "leones" para los negocios tildan en Jujuy a Morales y a Sarapura, que hoy es millonaria gracias al manejo de subsidios y venta de tierras de originarios. (Foto: CNPI).

SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial para EL SOL ABC- Por CNPI *). Es el brazo armado del gobernador de Jujuy Gerardo Morales, elegida para desembarcar en la Cámara de Diputados de la Nación, con absoluto rechazo del pueblo jujeño, no logró el cometido, pero hoy continúa con tratativas con nexos con Macri, Félix Díaz y Claudio Avruj, los que hicieron de los pueblos originarios un quiosco, con el objetivo de quitarles todas las tierras a las comunidades indígenas de todo el país, para entregarlas a las multinacionales amigas de Morales y Macri, para la explotación de sus recursos.

La fallida diputada nacional, pero que hoy está de nuevo en la contienda electoral, busca desorientada cómo acertar un negocio con los fondos internacionales de pueblos indígenas ante la inminente decisión de la política indígena nacional de dejarla expuesta en todos sus cometidos.

No cuenta con ninguna representación legal ni privada de las comunidades originarias de Jujuy y del país, pero se comunica y habla por en representación de todos. El litio y la expropiación de tierras en la Puna jujeña fue el hecho más visible de su desparpajo con aire indígena, al haber sido descubierta por las comunidades originarias de la Quiaca, Jujuy. Domina un séquito de diputados nacionales radicales macristas que la propusieron como integrante de organizaciones internacionales de pueblos indígenas, aunque no lograron instalarla, se conoce que tiene compromisos con algunas instituciones de ayuda a comunidades indígenas de argentina con fondos que jamás llegaron a destino.

 

Quién es Natalia Sarapura

Para conocer un poco del brazo armado de Gerardo Morales le comentamos que Natalia Sarapura a los 14 años inició su actividad a lado de la Dra. Nimia Apaza su mentora y por aquel entonces líder del Consejo de Organizaciones Aborígenes de Jujuy (COAJ), entidad que convocaba a comunidades de Jujuy, Salta y Tucumán. Allí aprendió sus primeros pasos en los temas de pueblos originarios. La chica de Morales creció con militancia mezclada entre peronistas y radicales en el barrio Mariano Moreno de la capital de Jujuy, en unas viviendas monoblock muy pequeñas que se le otorgó por política peronista a su familia. Eligió rápidamente por comodidad política alinearse con el radicalismo después de ser expulsada del COAJ de Nimia Apaza por traiciones a ese movimiento. Pero también había tenido su lugar en la Tupac, donde también traicionó y se vendió por dinero a Morales.

En su currículum se anuncia que tuvo participaciones en asambleas y debates previos a la reforma de la Constitución Nacional del 94, pero “jamás” estuvo en ninguna comisión ni mucho menos debates, los mismos artífices de la gesta indígena que incluyó el Inc. 17 en el Art. 75 de la Constitución Nacional. Negaron haberla visto alguna vez.

Sarapura publica a los cuatro vientos haber sido invitada por las Naciones Unidas a ser parte de la mesa de negociación de la Declaración Universal sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, pero lo cierto es que no hubo negociaciones para ningún derecho ni mucho menos mesas para tal caso, la declaración universal de los derechos de pueblos indígenas no surge de este proceso anunciado por Sarapura.

Expone haber sido parte del Foro Permanente para Cuestiones Indígenas de la ONU y en esto la única verdad es que desde el radicalismo impulsaron una participación que jamás se concretó, pero terminó con la mínima participación de enviados del gobierno de Alfonsín y de De la Rúa que no tuvieron éxito y los mismos dirigentes políticos radicales hicieron tratativas internacionales para llegar al único interés que los motivaba, los recursos del Fondo Indígena en la actualidad.

 

Dinero corrupto

Su nombre aparece en las filas de los diputados provinciales del radicalismo en el año 2001, cuando integró el Frente Cívico Jujeño entre gallos y medianoche comenzó a hacer fortuna la hábil muchacha, que se calcula en 5 millones de dólares entre propiedades e ingresos del Estado, su actual remuneración como funcionas radical del gobierno de Gerardo Morales, oscila entre los 230/ 260 mil pesos por mes más gastos de representación.

Los líderes de comunidades indígenas de la provincia de Jujuy se pronunciaron en su contra, son interminables las quejas en contra de la dirigente radical, por el vaciamiento y entrega de los recursos energéticos de los territorios de pueblos originarios de Jujuy.

En 2015 fue convocada por Gerardo Morales para organizar un enlace con los pueblos originarios de Jujuy a través de un invento radical, la Secretaría de Pueblos Indígenas. Más allá de los registros formales, en el seno del radicalismo reconocen que la designación de Sarapura obedece a fines prácticos: parte de los grandes proyectos económicos del gobierno, la explotación de litio y energía solar, se desarrollan en suelo habitado por comunidades originarias. Todas estas connotaciones en desmedro de las comunidades indígenas fueron de la peor calaña delictiva con procesos inconsultos a los pueblos indígenas y fuera de todo marco legal normativo al respecto.

El expuesto gobierno radical, en este tema, intenta tener un interlocutor válido con esos pueblos indígenas de Jujuy y la hoy candidata a diputada nacional Natalia Sarapura lo único que logró es quedar en absoluta evidencia que sus objetivos no eran ayudar a los primeros habitantes de Jujuy.

 

(*) Consejo Nacional de Políticas Indígenas