SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial-EL SOL ABC). Los muchachos macristas radicales hoy olvidan los globos amarillos que supieron inflar con mucha impulsividad entre 2015 y 2019, siendo uno de los gestores de la llegada de Mauricio Macri y tras de ellos los impulsores del grave y delincuencial endeudamiento del país, a lo que hay que agregar el provincial, que sobrepasa los 2 mil millones de dólares. Siendo uno de los más altos si se mide el ingreso per cápita jujeño y el PBI local. [1]
Esta descripción sucinta es para poner en contexto el escenario electoral provincial, ya que las huestes de Gerardo Morales –por ahora cree que los porteños le darán lugar— salieron a cubrir sendos actos en Palpalá y en Ciudad Perico enarbolando un escudo más grande que nunca de la UCR, cuando a principios de la gestión eran todos globos amarillos y guirnaldas en las “emotivas ceremonias” de la Pachamama en Purmamarca y en Tilcara. Pero por supuesto mintiendo. Claro que a los seguidores macristas poco les importa, con tal de quedarse otros cuatro años más en la Casa de Gobierno de Jujuy, con la asfixia para la democracia jujeña. Claro, que él único que no aparece es Morales —le da vergüenza ir a un acto de la democracia, cuando a la misma humilló de la peor manera— pero aparece el actual ministro de Hacienda, Carlos Sadir, el poco trabajador como diputado Mario Fiad y el menos preparado de todos, Raúl Bernis, que pinta para vicegobernador. Hay que decir la verdad: no sabemos qué haría la Provincia, si no hubiese un gobierno peronista a nivel nacional.
De acuerdo a lo que describen varios analistas como consultoras provinciales, lo que hizo que le gente se aleje del macrismo es que en Jujuy todos los gremios –cuyos líderes han sido cooptados— de trabajadores estatales están pintados. No existen. Si hacés huelga te descuentan y anuncias paros, el Ministerio de Trabajo te llama a “conciliación obligatoria”. Y palo y a la bolsa. Entonces, tenemos los sueldos más deprimidos a nivel nacional, con la inflación imperante. Sólo se arreglan los sueldos del gobernador y vice, diputados e intendentes. El resto la ve pasar.
En las tribunas poco se habla
En las tribunas poco se habla que todas las obras que está haciendo Morales es con fondos nacionales, que Carlos Sadir bicicletea con bajos salarios y con el reacomode de “los giros en descubierto” que utiliza con el Banco Macro, tras los giros que por distintos ítems tiene Nación con la Provincia.
Tampoco se dice que, de la deuda, con lo poco que pueden rescatar de los parques solares, es para pagar intereses solamente, porque hasta ahora Morales ni Sadir han salido a hablar de cuánto es lo que debe Jujuy en realidad. Tampoco se habla de que el Poder Judicial es ciento por ciento manejado por la UCR, en una especie de corset para los otros poderes de la Provincia. Ni qué hablar de los DD.HH., que en Jujuy no existen. Todo está vedado: el derecho a la protesta ni al mínimo reclamo.
Los negociados están a la orden del día. Eso lo manifestamos con respecto a la venta del ingenio La Esperanza, o con el manejo del transporte del litio desde los salares a los puertos chilenos. [2]
Otro tanto ocurre con el nepotismo instaurado. Casi el 70 % de la administración del Estado provincial está cruzado y ocupado por toda una plana de parientes y amigos. Nunca se había llegado a las proporciones que ahora muestran los datos estadísticos provinciales.
Y así estamos hoy: si la gente no toma la conciencia del cambio, se perderá la oportunidad de rescatar a Jujuy de su larga noche más oscura.
Referencias:
[1]
GERARDO I: Las venas abiertas de Jujuy, súper millonario; vino de Güemes a llenarse en la Tacita de plata
[2]
