NO SE PUEDE SEGUIR AMONTONANDO GENTE EN EL CONURBANO: lo que pasó ayer con los 20 muertos por intoxicación con droga, revela que es urgente trasladar la Capital Federal

Ciudades enteras rodeadas de villas miserias. En el llamado Conurbano también ocurre lo mismo. Y sólo cuando ocurren las tragedias, se habla por unos días. Esto merece un debate integral de trasladar la Capital Federal para desconcentrar tanta aglomeración humana. Nada funciona. (Foto: Clarín).

BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Ayer en su transmisión directa de los acontecimientos macabros de las muertes por intoxicación con droga estirada con algún veneno químico, de parte de Crónica TV, donde con grandes titulares decía que el ministro Berni dijo: “Los narcos nos han vencido”. Era aterrador y hasta angustiante para el televidente, que era partícipe de esa transmisión, ver que los muertos seguían aumentando y que los internados del partido de 3 de Febrero, de una villa miseria conocida como la Puerta 8, son parte de la dejadez de las autoridades y funcionarios públicos, que no se animan a presentar debate sobre que hay desconcentrar urgentemente la serie de villorrios de Capital Federal y del Conurbano.

Y lo venimos reiterando, una vez más, para el bien de los mismos porteños y de los que tienen buenas razones para vivir amontonados y casi desquiciados en el Conurbano, que la “única manera de desconcentrar todo este hervidero de gente, es crearles otros polos de desarrollo, donde la policía pueda controlar y las autoridades sanitarias estén un paso adelante para evitar estas tragedias”. La única solución es trasladar la Capital Federal a otro punto del centro-norte del país.

Policías en el bunker de la Puerta 8, cerca de Hurlingham, revisando la droga que causó la muerte hasta el momento de 20 personas. (Foto: Télam).

Las imágenes eran muy claras de los drones que enviaron los canales de noticias, para ver cientos de kilómetros de villas, donde no tienen calles y menos servicios esenciales, “donde es natural que el delito y delincuentes se guarezcan y sepan que es imposible que la ley y la Justicia les pueda dar alcance”.

Lo que pasó ayer en Puerta 8, nos demuestra claramente que “así saturemos de patrulleros y policías y que cada cinco minutos estos villorrios tengan presencia policial, el delito del narco seguirá pululando. Porque no es problema de policías en las calles, sino de la gran congestión de habitantes por km cuadrado y para colmo sin ningún plan de desarrollo urbano”.

De qué vale lamentarnos, si esto va a volver a ocurrir de todas maneras o de alguna otra.