SALTA (Especial-EL SOL ABC). En un recorrido por las calles de esta ciudad, especialmente por el centro de la ciudad, ya se comienza a ver en los rostros de los salteños y algún que otro turista, esa sensación de mirar al infinito y sin esa gesticulación de felicidad, porque estamos sobre las Fiesta de Fin de Año.
Todo lo contrario, cabizbajos algunos, otros mostrando signos de apuro, y los que pueden todavía comprando, aunque sea lo mínimo. Se detiene un chico de unos 17 años, con pares de medias y repasadores, para ofrecernos, al que preguntamos de cómo están las ventas. Sólo nos responde con una sonrisa triste: “Y nada jefe…sólo vendí dos pares en toda la mañana; me tendrá que quedar hasta la noche…”. Y así los restoranes, que sabían estar repletos, por lo menos el año pasado, y mucho más cuando la Selección de Messi salió campeona del mundo, hoy comienzan a vaciarse.
En algún lado, vimos a un señor de clase media alta, decir en voz que se escucha en las cuatro esquinas: “Cómo pudimos ser tan burros, que la tercera mayoría, con 10 senadores y 30 diputados nos esté gobernando… esto de la Argentina, no tiene nombre…madre querida”, mientras que el que lo escuchaba sólo asentía con la cabeza.
Pero lo más lindo de la situación, es que cuando uno pregunta: nadie lo votó a Milei. Nadie se quiere hacer cargo del muerto.
Caminar por las calles del centro de Salta, es darse con rostros apesadumbrados, cansados, mucho peor que lo que se vivió en tiempo de pandemia.
Otros decían, los que sí analizan la situación: “Hay que dejarlos que lo voten a Milei, sólo por su odio al peronismo; sólo cuando la bomba les estalle en las manos, recién empezarán a tomar conciencia de que en democracia hay que analizar todo, para no cometer errores. Y no dejarse llevar por los partidismos políticos”.
NdR: aprovechamos esta nota para decirles con mucha
honestidad y templanza, que le agradecemos de corazón
vuestro acompañamiento y rogamos para que el Altísimo
nos reconforte con sus bendiciones en estas Fiestas
de Fin de Año. Un abrazo grande a nuestros Lectores
y Auspiciantes.
