MONTMELÓ, Cataluña, España (Especial para EL SOL ABC). En España se dieron cuenta del mal negocio que es privatizar las rutas nacionales, por se entrega en concesión tramos en distintas partes del país, pero los concesionarios sólo ponen las cabinas y los trabajadores, hacen algún arreglito de las vías de comunicación y hasta ahí, y hay que parar de contar. “Ese es el negocio más estúpido para el Estado, del que se sirven muchos avivados, que los hay en todas partes”. O sea que el Estado pone la plata para hacer las rutas, luego las tiene que “reasfaltar y luego se las tiene que entregar de nuevo al concesionario en perfectas condiciones de uso”. Entonces, “¿dónde está el negocio para el Estado?”. En ningún lugar.
Entonces ahora los gobiernos municipales y el mismo Gobierno español están en la dinámica de revisar todos los contratos de concesión de peajes y aquellos que no cumplan los requisitos mínimos de trabajo y adecuamiento de rutas o autopistas, “se le quitará indefectiblemente la concesión”, dijeron expertos.
Así lo hizo saber también Antonio Rodríguez Cerezo, para el diario ABC, que dijo: “Cerca de 475 kilómetros de autopistas que actualmente se rigen en régimen de concesión de peaje pasarán a formar parte del sector público en menos de una semana. Así, el próximo 31 de agosto caducarán las concesiones de la AP-7 en los tramos que van desde La Junquera (Gerona) hasta Salou (Tarragona), y de Montmeló hasta El Papiol, en Cataluña, además del de la AP-2 que une Zaragoza con el Mediterráneo (hasta El Vendrell, en Tarragona). Adjudicaciones que hasta ahora explotaba Abertis”
Estos traspasos están dados porque ninguna, de las autopistas concesionadas, cumplen los requisitos de calidad y buena vialidad, y es el Estado el que debe seguir invirtiendo. Según los expertos, es un negocio para pocos, “pero pícaros”.
NdR: En la Argentina sucede lo mismo. No sólo que encarecen el transporte de materiales y mercaderías como de insumos, sino que las rutas concesionadas no tienen la calidad y el mantenimiento que debieran tener. Es un negocio sonso para el Estado, que es el que verdaderamente debiera hacerse cargo porque es el que paga y permanentemente está invirtiendo en la reconstrucción del mapa vial nacional. Por ello, desde EL SOL ABC abogamos para que algún diputado nacional lleve un proyecto de ley para que “se saquen los peajes, o sea el Estado el que administre estos dineros, que, por ahora, sirven para que “se fuguen divisas al exterior”.
