TROLLS IDENTIFICADOS: intenso movimiento en las redes de agentes pagos por sectores afines a la derecha y ultra derecha, con el fin de desacreditar al Peronismo

Bajo el nick "Daniela Roitstein" así pretenden "taladrar" cerebros jóvenes y no tan preparados. (Foto: Twitter).

BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Como no tiene la derecha y la ultra derecha un proyecto de país para mostrar, se han dado en conformar grupos de trolls pagos en distintas redes sociales, con tal de desacreditar y vilipendiar la actividad política y de información de funcionarios, medios nacionales y populares, actores, escritores o periodistas que defiendan una Patria libre, justa y soberana.

Casi siempre estos grupos utilizan las redes preferidas como WhatsApp, Twitter, Instagram y por último Facebook, donde quedan más al descubierto por los datos que les piden para pasar a pertenecer a la misma.

Siempre, hablando de estos momentos, donde la derecha “ha perdido el curso de los acontecimientos y está totalmente desorganizada, fruto de tanta exposición en estas redes, dado que el rival a destruir va recomponiendo sus líneas y tiene obras y políticas para mostrar –por supuesto, siempre en favor de las mayorías— es que han comenzado a proliferar los trolls destructores del Peronismo”, que quieren “hacer caer en el desánimo a la juventud, principalmente aquellos que todavía no están todo lo preparados que debieran estar”. Es con el fin de arriarlos para sus filas y hacerlos adeptos de sus mentiras a sabiendas. Es como conseguir adeptos para alguna religión o para una tarjeta de crédito”, dicen algunos especialistas.

Por supuesto, esto no es algo nuevo, ha tenido mucho éxito en la captación y cooptación de millones de personas que se creen en los “memes”, mensajes, fakes news (noticias falsas) y ataques personales contra funcionarios del actual Gobierno, o contra figuras y dirigentes militantes del Peronismo.

Existe un libro “Fake News, Trolls y otros encantos”, de Ernesto Calvo y Natalia Aruguete, donde en su página 12 dicen: “El escenario ha cambiado mucho en estos años. Las encuestas muestran que las redes sociales son en la actualidad la principal vía de acceso a noticias y la forma más habitual de consumir información política de manera incidental. [1] Nuestros muros virtuales reportan de manera indistinta los comentarios de amigos y los titulares del día, en un mosaico ecléctico mezclan medios tradicionales, notas de blogueros y comentarios de usuarios. El Daily Me [2] que Nicholas Negroponte anticipó hace veinticinco años no es una página web con noticias ascéticamente compiladas a la medida del usuario, sino un espacio de comunión con pares interconectados; un espacio de permanente exposición pública, gratificación narcisista y conflicto. A mediados de 2016, sin embargo, los problemas políticos y comunicacionales que caracterizan a las redes ya eran visibles. Desde sus inicios, las redes fueron un punto de encuentro y socialización, aunque también una arena de intervención política. A medida que los usuarios colgaban contenidos para dar cuenta de sus preferencias políticas, distintas generaciones de aplicaciones los habilitaban para apoyar o disputar las preferencias de sus pares interconectados. Los políticos, que hoy operan a muy bajo costo para modelar y satisfacer las demandas informativas de sus votantes, reconocieron enseguida las virtudes de un sistema que personalizaba su relación con el electorado. Desde la comunicación política, se concibe a las redes sociales como una gran mezcladora de encuadres mediáticos”.[3]

 

Hoy los hay otros

El trabajo se ha organizado de “mejor manera”. Los grupos nacen al calor de WhatsApp –tal como Revolución Federal, grupo terrorista formado para asesinar a la líder del Peronismo Cristina Kirchner— pero se diseminan en Twitter preferentemente, porque es la red más política e instantánea del momento. Pero lamentablemente, a pesar de sus “nicks falsos” (apodos o alias) sus pasos quedan marcados para siempre. Tal como les sucedió a los terroristas pagos de Revolución Federal como Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte, Jonathan Morel, Ximena Tezanos Pintos, Gastón Guerra, Hernán Carrol, el diputado Gerardo Milman, sus asesoras Carolina Gómez Mónaco e Ivana Bohdziewicz.

Marcos Palazzolo junto al cordobés Carlos Zenozain, de “CórdobaLibre”. (Foto: Twitter).
El grupo de trolls creado por Palazzolo, conocido en las redes como “Twitstares JxC”. (Foto: Twitter).
Reunión de trolls de Palazzolo, mediante zoom. (Foto: Twitter).

Pero existe otro grupo comandado por Marcos Palazzolo, que en su cuenta dice ser abogado, como también se dice creador de “Libres Republicanos” y de “Twitstares JxC”, grupos de trolls pagos, que están trabajando en todas las provincias. El mismo Palazzolo se descubrió al tuitear: “Marcos Palazzolo@marcalpalazzolo. Hola gente, con @Librepublicanos. Este mes (fecha a definir) estaremos recorriendo Córdoba, San Luis, Mendoza y San Juan, si sos de alguna de estas provincias y querés ser parte de nuestros grupos de WhatsApp dejame un msj o comentá la publicación. ¡Que tengan un hermoso sábado!”. Esto tuiteó ayer.

Existe otro más peligroso y dañino. Este grupo directamente está organizado para emitir fakes news mediante memes. Así apareció una Daniela Roitstein posteando sobre que “su hija” se fue a vivir al mismo tiempo a Israel y Finlandia, donde la recibieron con todos los honores y hasta con departamento para vivir. Lo que no dijo esta Roitstein cómo hizo su hija para desdoblarse para vivir en dos naciones tan distantes al mismo tiempo.

Fake compartida a los jubilados de todo el país mediante grupos de WhatsApp. (Foto: Redes).

Finalmente se está compartiendo una fake news por medio de un meme a todos los jubilados del país, donde se culpa a un tal Carolina Muñiz, que se dice además que es La Cámpora, que dijo: “Acá los jubilados son una carga, son que gente que está al vicio y no aporta nada al país. ¿Por qué debemos pagarles? Tendríamos que quitarle ese beneficio, porque la gente humilde con niños lo necesitan más. La verdad, los jubilados son una carga para mi Presi querido. Deberían desaparecer. Si ellos no trabajan y viven encerrados en sus casas, a nosotros no nos sirve eso!! Chau jubilaciones y más asignaciones”. Luego el meme muestra una foto de una tal Carolina Muñiz, que nadie sabe ni le interesa si es de La Cámpora o no, pero sí le queda grabada en la mente del jubilado que recibió el mensaje que al Peronismo no hay que votarlo.

Entonces, el político la única forma de contrarrestar a la derecha y ultraderecha peligrosas para los países, porque fueron montadas y fomentadas, desde las usinas del sionismo internacional para vivir de los recursos de los países, es como hizo el hoy presidente electo de Brasil Lula da Silva, que, ante un Partido de los Trabajadores destruido, tuvo que pelear junto al pueblo contra los millones de memes y mensajes en las redes sociales. Casi lo logran, pero Lula lo consiguió.

Algo parecido sucedió con la vuelta del MAS en Bolivia, pero en sentido inverso. Desde Argentina Evo Morales aglutinó la ofensiva contra los golpistas de derecha que se habían instalado en el gobierno mediante el golpe de noviembre de 2019.

Por último, utilizan el nombre de un periodista conocido como Carlos Pagni, para decir fakes como ésta: “Carlos@Pagniok. URGENTE | Están bloqueando y cerrando cuentas que denunciaron el fraude en las elecciones en Brasil. Compartí para viralizar. Carlos @Pagniok Periodista en LN+. Odisea Argentina (Lunes 22hs). No oficial, apoyo”.

 

Referencias:

[1] Véanse, al respecto, Boczkowski y otros (2018) y Kümpel (2019).

[2] En un texto clásico, Nicholas Negroponte (1995) anticipaba el mundo mediático-digital que habitamos y especulaba sobre ese futuro en el cual cada uno de nosotros recibiría las noticias, los sonidos y las imágenes que se ajustaran a sus preferencias. Negroponte describía nuestro acceso al mundo de las noticias digitales como el Daily Me, un diario de noticias creado a nuestra medida, que nos tendría como consumidores únicos.

[3] A lo largo de este libro definimos el término “encuadre” como el acto de “seleccionar y realzar algunos aspectos de eventos o temas, y hacer conexiones entre ellos para promover una interpretación, evaluación y/o solución. Las palabras e imágenes que componen un encuadre.