SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial-EL SOL ABC). En Jujuy nadie habla, todos esconden. No aparece ese programa “Jujuy Investiga” —hoy su ideólogo y conductor fue elegido senador provincial en Salta—, que “todo” lo investigaba, pero lo “disolvieron”, así como ayer los empleados del emperador Morales disolvieron de un plumazo el Banco de Desarrollo de Jujuy, entidad que durante el macrismo cumplió las funciones de un enorme “lavadinero y centro de bicleteo” de los cuantiosos fondos públicos que enviaba el gobierno de Macri a la Provincia.
El emperador con la suma del poder público y con todo el campo a su disposición, como un “rayo de luz” vio la manera de multiplicar a su favor y la de sus hermanos y resto de la familia miles de millones de pesos, que no lo podía hacer con intermediarios de fuera de la provincia porque es muy difícil borrar huellas y porque siempre algún dato dejás colgando. Fue así que en un abrir y cerrar de ojos, al Banco de Acción y Préstamos, lo transformó rápidamente en el Banco de Desarrollo SE, para actuar como un banco consumado y así poder entrar en “el gran bicleteo nacional” que fue la gestión Macri.
Pero hay un dato que a muchos se les escapa: ¿a quién puso para presidir el ahora banco disuelto? A su cuñado Marcelo Fernández, contador hermano de su primera mujer, hoy “asesora” en el Senado de la Nación. Es como poner a cuidar el gallinero al zorro.
Por qué viajó tanto Fernández al exterior
El ahora ex presidente Marcelo Fernández —que viene a ser el Nikki Caputo o el Calcaterra de Macri—, según denunciada presentada por la diputada provincial Mariela Ferreyra en el plenario de la Cámara de Diputados de la Provincia, realizó 90 misteriosos viajes al exterior. De ellos unos 30, según datos recogidos de nuestras fuentes, fueron a Panamá y EE.UU. Otros 20 a Europa, con conexiones a Hong Kong y Sanghai (China), e Indonesia. Según la misma diputada aludida, “no supo decir en el plenario de debate ni para qué fue ni dónde fue”. En una clara demostración, de que “en el descubrimiento de estos viajes está el hilo fino de la corrupción con los dineros del Estado jujeño de parte de Morales y sus principales ministros”. Allí está el “iceberg” de la corrupción moralista, que tanto los diputados como los medios de comunicación temen investigar porque se quedarían sin la pauta provincial publicitaria. Y hasta tiemblan cuando lo ven al emperador. Le tienen terror.
Allí están también los hechos que llevaron a Morales a negociar en la Bolsa de Londres los grandes salares puneños. Todo fue hecho para que el emperador y su banda estén consumando el más atroz saqueo de los recursos que les corresponden por ley suprema a todos los jujeños y no a la familia Morales. Y ahora se nota que el ingreso de éste a la política no fue para solucionarle la vida a la gente, sino para solucionar su terrible angurria por ser algún día súper millonario, cosa que al día hoy lo es.
Pruebas contundentes
Las declaraciones del cuñado de Morales, a cargo de la presidencia del banco disuelto, corroboran el grado de oscuridad y corrupción al que está sometiendo el régimen al pueblo jujeño. Marcelo Fernández no supo o no quiso contestar nada de lo que se le preguntó. Todas sus respuestas fueron evasivas.
Así lo atestigua también el portal El Submarino de Jujuy, que al respecto dijo: “La presencia del titular de esa entidad, Marcelo Fernández, que fue sometido a un largo interrogatorio, sembró malestar y dejó ‘en claro que la orden de cerrar la entidad, fue realizada por el gobernador, Gerardo Morales y no el Banco Central de la República Argentina’, aseguró la diputada provincial Mariela Ferreyra, del bloque Frente de Todos-Partido Justicialista”.
El mismo medio también se refiere a la declaración de la diputada Mariela Ferreyra, quien desmintió a Fernández, cuando expresó que “el cierre del banco se produce por orden del BCRA”, a lo que la legisladora le contestó: “El funcionario adujo que es el Banco Central de la República Argentina el que intimó a la Provincia a cerrarlo, pero esto no es cierto, ya que la entidad nacional lo que hizo fue intimar para que no se use más el nombre de Banco porque sus directivos no hicieron las gestiones correspondientes en su debido momento. Pero el Central no tiene la potestad para ordenarle al Gobierno de Jujuy que cierre una institución bancaria”.
“Fernández y otros directivos del Banco, como las autoridades de la Provincia, promueven mentiras acerca de esta entidad y se apoyan para argumentar sus dichos en que muchas personas desconocen todo lo relacionado al funcionamiento de entidades bancarias”.
Mientras tanto, ante tanto atropello a la razón y a la vida institucional de Jujuy, Morales y su banda tratan de llegar a acuerdos con el Gobierno nacional para salvar su segura ida a prisión por todos estos desmanejos en contra de la Provincia, una vez que los jujeños sepan determinar con conciencia cívica cuál es el verdadero enemigo de Jujuy y su democracia.
