ASUNCIÓN, Paraguay (Especial para EL SOL ABC-Por Franco Villagarcía Ruiz). Hace una semana fuerzas policiales conjuntamente con la DEA daban con una avioneta con matrícula boliviana, con 440 kg de cocaína, donde se detuvo a dos sujetos, piloto y copiloto, de nacionalidad boliviana, a lo que se adosó un auto Mercedes Benz, con patente de Paraguay, cuyos conductores huyeron, pero luego de tiroteo fueron detenidos.
De acuerdo a información proporcionada por investigadores locales y norteamericanos, la República de Paraguay se ha vuelto, por su estratégico lugar “en un puente internacional para el almacenaje y distribución de droga, que se hace vía barcazas que llevan soja —que proviene de la Argentina, vía contrabando, para no pagar retenciones— por el río Paraná, hasta la República Oriental de Uruguay y también desde sendas pistas clandestinas, que utilizan bolivianos, uruguayos y paraguayos”.
En el primer caso, los detenidos serían parientes de la ahora detenida ex presidenta de facto de Bolivia, Jeanine Áñez, que en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), contarían con empresa ligada a “exportaciones e importaciones”, que sería una fachada del verdadero “negocio ilegal” hacia Paraguay y Uruguay, dijeron los investigadores.
Tras cartón, se supo que la avioneta “Centurión” tenía logística de apoyo de parte de grupo paraguayo ligado al cartel de Ultranza, cuyos miembros fueron detenidos dos días después, no sólo por este caso sino por proceso anterior por narcotráfico entre Paraguay y Uruguay.
El diario El Observador de Uruguay abundó en información sobre este caso, al señalar que “el jefe de Inteligencia Sensible de Paraguay, Moisés Almada, informó que la avioneta descubierta en un campo del departamento Misiones, sudoeste del país, fue incautada, junto a un automóvil con matrícula paraguaya, en un campo de propiedad de un uruguayo de apellido Silva, que sería parte del cártel de Ultranza”.
Ligazón y detención del clan uruguayo-paraguayo
De acuerdo a información ampliada por el diario ABC Color, de hace tres días atrás, existen nexos estrechos entre los últimos procedimientos policiales y la banda narcotraficante Ultranza Py, cuyos 13 integrantes fueron detenidos.
Luego de darles seis meses más a la Fiscalía General para continuar con las investigaciones, para ver si hay nexos del cártel con productores agropecuarios argentinos, o seudos agroproductores, la misma informó que los detenidos son Conrado Ramón Insfrán Villar, Luis Fernando Sebriano González, Job Von Zastrow Masi, Liz Fabiola Taboada Gamarra, Fátima Irene Koube Ayala, su hermano Alberto Koube Ayala y su pareja María Noelia Colmán Alarcón, los fiscales deberán presentar requerimiento conclusivo el 23 de febrero de 2023.
En tanto que para el ex diputado colorado Juan Carlos Ozorio Godoy y Tadeo Moisés González Zárate, el Ministerio Público tiene plazo para presentar su requerimiento hasta el 2 de marzo de 2023.
Para los incoados Alexis Vidal González Zárate y su pareja Irma Vergara, así como para Diego José Cubas Jordán, los fiscales deberán presentar su requerimiento el 15 de marzo, mientras que con relación a Reina Mercedes Duarte Aguilera, el plazo se extiende hasta el 17 de marzo de 2023.
Todos estos detenidos montaron una gran empresa, para exportaciones, y que es parte del Grupo Tapyracuaí S.A., la gran fachada para el envío de cocaína a Uruguay, España y Sudáfrica, desde el puerto de Asunción, vía barcazas cargadas con granos hacia Uruguay, donde los controles son casi nulos, y los agentes aduaneros se venden por 2 dólares.
