Lo que no te muestran los medios de las corporaciones, el crimen de la niña palestina Rafif Mohammed Karain de 4 años

Esta es Rafif, de tan sólo 4 años, asesinada por soldado israelí en Jerusalén Este. (Foto: Twitter).

FRANJA DE GAZA, República Libre de Palestina (Especial para EL SOL ABC-Por Nabil Al Sahli). Sigue en la memoria del periodismo alternativo, el que no se vende por unas monedas, hablando del horrible asesinato por las fuerzas violadoras de Israel de la niña Rafif Mohammed Karain, de tan sólo 4 años.

Este silenciado genocidio israelí de los niños palestinos tiene una meta intrínseca, de dañar las bases de cualquier recuperación del pueblo palestino, que sufre la humillación de su libertad y robo de sus territorios por parte “del ahora amo del mundo”: Israel.

Toda esa fantochada en que se ha convertido EE.UU. a manos de la infiltración sionista, está teniendo como respuesta la muerte de George Floyd, ciudadano norteamericano de origen africano y a todo el estadounidense medio percibiendo el contexto de mentira en el que vive. Prisionero y extorsionado en su propia tierra. Lo mismo que se “vende al mundo” sobre que los palestinos somos “terroristas”. Cuando les prestamos territorio luego de la Segunda Guerra Mundial y luego adujeron que “ellos eran los verdaderos dueños de estas sagradas tierras”. Aun así, permanecieron y formaron el más poderoso ejército de la Tierra, para esclavizarnos y luego para asesinar a niños como Rafif. Asesinado por una bala de fusil de un soldado israelí en su cabeza en el lado Este de la ciudad de Jerusalén, que pertenece a Palestina.

Acá en esta desolada parte del mundo, nadie hace justicia en nombre de un pueblo que sólo quiere vivir en paz en su propio suelo.

 

Un proyecto más grande

He escrito para el diario Monitor de Medio Oriente (Middle East Monitor) que las autoridades de ocupación israelíes han transformado las imágenes de alegría, juego y educación, que deberían ser la norma para los niños palestinos, en un sorprendente número de violaciones cometidas por el ejército en Cisjordania y la Franja de Gaza. Alrededor de 1,3 millones de niños palestinos en Cisjordania se ven afectados diariamente por la política de arresto y detención por parte de Israel, así como por ataques con armas de fuego y golpizas de los colonos ilegales. Mientras que un millón de niños de Gaza son considerados los más afectados por las restricciones impuestas por la ocupación. Esto incluye el asedio, la agresión y las múltiples ofensivas militares. Los niños menores de 15 años representan el 42 por ciento de la población total en la Franja de Gaza; Israel ha asesinado básicamente su infancia.

’’El problema de los prisioneros palestinos, incluidas las huelgas de hambre, ha sido importante para la causa palestina desde 1967, y ha afectado a un gran número de personas en Cisjordania y en la Franja de Gaza. Este problema sigue conectado con la colonización cada vez mayor por parte de Israel, ya que su ocupación invade los territorios palestinos por la fuerza de las armas y el terrorismo de Estado.

’’El significado de los prisioneros es evidente a partir de los hechos y cifras. El ejército israelí ha arrestado al menos a 800.000 palestinos desde 1967 en Cisjordania y la Franja de Gaza. Actualmente, hay 7.000 prisioneros palestinos en las cárceles israelíes, incluyendo 70 mujeres y más de 400 niños. Las autoridades de ocupación mantienen detenidos a los palestinos en 22 cárceles y centros de detención, donde el 95 por ciento de ellos han sido sometidos a torturas y tratos degradantes. Los interrogatorios incluyen la tortura desde el momento de la detención. Es común que los prisioneros sean despojados y esposados, y obligados a permanecer al aire libre en temperaturas de congelación. Rara vez se les permite a las familias visitarlos, incluso a los niños prisioneros”.

De todo ello, no habla el mundo ni la Unicef ni otras organizaciones de Derechos Humanos para ver cómo viven y como sufren los niños palestinos.

Lo que está pasando en EE.UU. es fruto del propio cáncer introducido por el sionismo. Hoy ese pueblo está enfermo, no sabemos si es una enfermedad terminal, pero todos creemos que algo está cambiando y que las mejores torres siempre caen.