LA PAZ, Bolivia (Especial para EL SOL ABC-Por Resistencia Bolivia). Una investigación estableció que 7 de cada 10 bolivianos desconfía de los medios de comunicación, esto se debe a las constantes mentiras que difunden los medios hegemónicos. Pero ciertamente hay evidencias, también, del apoyo de los medios pro-norteamérica al fallido golpe gestado en el Oriente boliviano.
Las encuestas realizadas por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), en diferentes países de la región, revelan una profunda crisis de credibilidad de los medios hegemónicos de comunicación, donde la mayoría tienen una imagen negativa. Los datos más relevantes de los estudios son los siguientes:
- Argentina: el 81 % de la población no cree en los medios de comunicación
- Bolivia: el 69,1 % de la población no cree en los medios de comunicación.
- Colombia: el 64 % de la población no cree en los medios de comunicación.
- Ecuador: el 64,1 % de la población no cree en los medios de comunicación.
- Perú: el 54,8 % de la población no cree en los medios de comunicación.
- Chile: el 66,7 % de la población tiene una imagen negativa de los medios de comunicación.
- México: el 66,5 % de la población tiene una imagen negativa de los medios de comunicación.
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Banner del informe de la CELAG. (Foto: CELAG).
Con respecto al caso boliviano, los medios hegemónicos de comunicación han sido duramente criticados por la población por mentir constantemente, publicar noticias falsas, y distorsionar la realidad para favorecer a los políticos. Muchas personas apuntan a Página Siete, EL Deber, Unitel, Red Uno, Fides, entre otros, como los principales medios de comunicación que se dedican a difundir mentiras en vez de informar.
El reciente intento de golpe de Estado por parte del Comité Cívico de Santa Cruz, Gobernación de Santa Cruz, dirigentes como Carlos Mesa, Tuto Quiroga y rectores universitarios, que sirven a mandatos de los personeros de las embajadas norteamericana, inglesa e israelí, es parte de esta andanada de fake news en los nombrados medios de comunicación que se prestan a ser “enemigos de los bolivianos”.
Fuente: CELAG
