
SALTA (Especial-EL SOL ABC). Pasando Campo Quijano, a unos 25 km de la ciudad de Salta, se encuentra el paraje conocido como Quebrada del Toro, donde varias etnias originarias ocupan desde hace siglos parcelas cerca del río Toro, que las utilizan para cultivos y cría de ganado ovino, caprino y en algunos casos vacunos. Ahora la denuncia nace de la ciudadana Gladys Cruz, de 29 años, la que dijo que “fui emboscada por unos malvivientes que quieren sacarme de mi propiedad, que es herencia de mi familia”.

Ella contó que en ese lugar explota actualmente tierras con tareas de agricultura, ganadería de subsistencia y artesanías. Contó que un grupo de personas la intentó hacer escarmentar con métodos brutales en una disputa por la propiedad de un lote. Ella dice que pertenece a la comunidad indígena de Las Cuevas.
El diario El Tribuno también informo: “Según su testimonio, tres mujeres de 48, 27 y 20 años llegaron a su propiedad y sin más palabras la atacaron de manera demencial. Según relató la mujer, primero la golpearon con los puños y luego la derribaron.
’’Ya en el piso la pusieron boca abajo y le hicieron morder las nalgas y las piernas con los perros, para finalmente una de ellas orinar en una lata. Aseguró que entre las tres mujeres le hicieron beber el contenido de la misma más otros vejámenes inconfesables.
’’Gladys dijo que la dejaron inconsciente y que recuerda cada palabra que las mujeres vecinas le gritaban en sus oídos mientras la sometían a todo tipo de tormentos.
’’Entre estas frases recuerda que le repetían ‘vos crees que sabés’, ‘no te vamos a dejar que hagas nada aquí, te vamos a destruir todo’ y ‘tenés que irte’.
’’Cuando las mujeres se habían retirado dejándola lesionada, Gladys intentó salir a la ruta 51, allí la alcanzó el abuelo de las mujeres, quien con un cable la azotó hasta dejarla en el piso”.
Son otros originarios
Lo que se pudo saber de acuerdo a lo que relató la joven, es que “parece que mi forma de querer progresar; o sea, estudiando; les provoca envidia y mucho recelo. Así que comenzaron a atacarme desde que comencé a estudiar, pero ahora se ha hecho más virulento ese ataque, ya que parecen que saben que me voy a recibir”.
Gladys aseguró que todas esas amenazas nacieron de la disputa por la tierra y por su profesionalización, ya que es técnica agrónoma y cursa el cuarto año de la carrera de ingeniería agronómica en la Universidad Nacional de Salta (UNSa).
“Lo que ellos quieren es que me vaya y deje toda abandonada mi propiedad, para quedarse con ella; por ello pido al Gobierno que me ayude, porque soy una mujer sola, por favor”, expresó finalmente a la prensa provincial.