
BUENOS AIRES (Especial para EL SOL ABC-Por Seba Schwarcz). En el acto de asunción del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se pudo apreciar en vivo y directo el grado de insania que tiene Javier Milei, fruto de su fuerte medicación por su esquizofrenia, en dos diagnósticos expresados en distintos momentos: uno en 2018, en Metán (Salta) y otro en septiembre de 2023, por una médica siquiatra del FLENI. [1]
ENLACE DE TWITTER QUE MUESTRA A MILEI CON SU COMPULSIÓN NERVIOSA:
https://x.com/i/status/1798005887552147791
Lo que enseguida tuvo repercusión en las redes sociales, de donde rescatamos una opinión que decía: “Estamos en el Titanic y el capitán es un ‘fisura’ total”. Por lo menos así se descubre una vez más a Milei, quien no está condiciones para dirigir un país, mientras las cámaras de un celular lo filmaban y se notaba el alto grado de abstinencia de su medicación, como su delirium tremens y una serie de tics nerviosos detectados.
Luego ayer apareció en reunión de gabinete y en la antesala de una conferencia de prensa, como luego salió a saludar a unos niños, verja mediante, en Plaza de Mayo, pero con un rostro hinchado y unas ojeras tremendas, que denotan su “poca salud”. Lo peligroso: repitiendo sus latiguillos, pero fuera de contexto, como que “sus ministros son los mejores del mundo”, cuando la crisis económica y social se multiplica entre las clases baja y media en todo el país. Esta situación de “evasión de la realidad” debería llamar la atención a su círculo íntimo, pero también a todos porque no sabemos en manos de quién estamos.
El porqué de los viajes
Ya lo adelantamos desde estas páginas que sus viajes tienen una razón de ser: no puede quedarse aislado entre cuatro paredes en la residencia en Olivos, porque “algún daño grave podría auto infringirse” y necesita que el grado de adrenalina que acumula sea disminuido “con los viajes constantes”, que son también para tratarse clínicamente. Así lo han determinado quienes auspician y apoyan su gestión en la Casa Rosada, porque saben que, si se les enferma, muere o dimite su pelele, están hasta las manos por los graves hechos de corrupción que se vienen descubriendo.
Finalmente, muchos analistas creen que “más temprano que tarde, en uno de sus tantos viajes programados por sus médicos, Milei va a quedarse definitivamente en el exterior, y renunciando a su cargo”. Asimismo, dicen, que “ya lo habría hecho, pero por la fuerte presión que tiene de esos círculos oscuros que lo pusieron en el poder, todavía trata de mostrarse como mandatario, pero a costas de dejar cada día más marcados sus dedos de su insanía mental”.
Referencia:
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