SAN SALVADOR DE JUJUY (Especial-EL SOL ABC). El jefe del régimen jujeño debe dejar de lado la agenda vacacional que había hecho circular entre su entorno, porque las noticias que llegan desde la Casa Rosada no son muy halagüeñas. El mensaje que dio el presidente Alberto Fernández ante Gustavo Sylvestre por el tema de la deuda de la provincia de Buenos Aires, fue muy claro y contundente: “He hablado en Mar del Plata con Axel; estoy al tanto de la situación del cuadro económico de la Provincia, pero confío en el gobernador, que es quien está llevando las negociaciones con los acreedores. Eso lo va a definir él”, dijo anteanoche en Minuto Uno en la entrevista exclusiva para de C5N.
Esto repercutió sobremanera en los funcionarios y en el mismo Morales, que esperan el “milagro” de Alberto Fernández, que sin querer es un mensaje para sus huestes locales, que pensaron que haciéndose reelegir a como dé lugar, con trapisondas y trampas de por medio, sabiendo de antemano que “Macri no podía durar otros cuatro años”, pero con el “salvavidas” que creía él que era Carlos Haquim, por su cercanía con Sergio Massa cuando lo apoyó con el Frente Renovador, que ganando Alberto las “fuentes de financiamiento del Estado iban a seguir proveyendo fondos para mantener a toda la planta de familiares, parientes y amigos que instaló a lo largo y ancho de la provincia”. Parece que el mensaje que dejan las palabras del presidente Fernández son muy claras y contundentes: “Hemos venido para ser diferentes, hemos venido para ser mejores”, no es sólo un eslogan de campaña, sino que está marcando el camino y derrotero que tendrá un Gobierno, que tiene todo en contra en el aspecto internacional y que el daño producido en todos los estamentos de la economía social, industrial y de pymes es tan grande, que “el mismo presidente no puede estar prometiendo la maquinita de hacer dinero para financiar las burradas que cometieron los gobernadores anteriores, con un endeudamiento sin sentido en muchos casos para pagar ‘gastos corrientes’, para seguir en la misma que es dilapidar los recursos de todos los argentinos”. Acá hay un nuevo presente, que es Alberto Fernández y que quiere llevar al crecimiento al país desde la sostenibilidad del sistema.
Entonces qué podemos esperar
Entonces, lo que le espera a Morales es mover la cachas suyas y las de sus ministros, para ver cómo se las ingenian para “arreglar con los acreedores y comenzar a conformar un ‘fondo de sostenibilidad para hacer frente a los compromisos”. En sí no hay vacaciones ni Carnaval amigos, sino que el mensaje es claro: “Hay que ponerse a laburar”. Más si sabemos que fueron ellos mismos los gestores de tremendo desastre económico, que creían además que se iban a perpetuar en el tiempo. Total, “Mauricio es un genio y es un tipo que quiere mucho a Jujuy, porque a mí me da todo. Por eso lo aprecio mucho”, supo decir en reiteradas entrevistas en el “canal amigo”, de su amigo Jenefes este jefe del régimen, que cada vez se empequeñece más y más.
Y todo esto no lo vieron los jujeños, porque les engañaron con el eslogan de “Jujuy, Paz, Orden y Trabajo” y con los millones de bolsones y subsidios que repartieron como si esto fuera un corso carnavalero y los intendentes todos enflorados y serpetineados bailaban al lado de las murgas y sus reinas, tal el caso de Julio Bravo, el intendente de San Pedro o de Oscar Jayat en Libertador Gral. San Martín.
Hoy la ampliación de la ruta nacional 34, tramo Pampa Blanca-El Cuarteadero está paralizada, como denunció el diputado Rivarola. Los parques solares de la Puna no funcionan, porque se necesita más dinero para hacerlos viables. El ingenio La Esperanza está totalmente quemado. El tren de Volcán está sufriendo los primeros óxidos y la Finca El Pongo tiene a los productores de cannabis todos dopados de los tremendos saques que se dan, porque plata no cobran.
