Son pocos los medios de prensa que pueden jactarse, como de profesionales de la palabra y la comunicación, tanto escrita, radial o televisiva, de defender los intereses de las mayorías. Los bienes soberanos de la Patria, el legado histórico de San Martín, Belgrano, Martín Miguel de Güemes, Mariano Moreno, Chacho Peñaloza, Juan José Castelli, y tantos prohombres como Favaloro, Mattera, Houssay, Scalabrini Ortiz, Gral. Domingo Savio, Juan Domingo Perón, Bernardo de Irigoyen, Eva Duarte de Perón, Arturo Illia, Ricardo Balbín, Dr. Ramón Carrillo, Dr. Arturo Oñativia, Raúl Alfonsín, o Néstor Kirchner, etc, de estar siempre cuando el país los necesitó, porque los “enemigos de la Patria son diversos y tienen muchos camuflajes”.
Es bueno que reconozcamos a medios como EL Destape, C5N, Página 12, Tiempo Argentino, y programas como ADN, Minuto Uno, La Tarde con Víctor Hugo Morales y donde también se insertaron medios nuevos como EL SOL ABC, El Disenso, InfoBaires24, etc, que fueron siempre fieles a un estilo y a una ética que responde a las normas periodísticas más elementales.
Cada uno tiene su lugar y su espacio. Cada uno sabe el zapato que calza. Todo ello el lector lo sabe y sabe diferenciar quiénes hicieron “el aguante” cuando el vendaval macrista perseguía a colegas, cerraba medios, mientras que otros “timoratos” por miedo a perder la pauta se volcaron a defender lo indefendible, con los resultados que están a la vista de todos.
Por ello, no nos engañemos, hoy en esta vereda nueva se han sumado miles, pero muchos de esos miles hasta hace poco inflaban globos amarillos y festejaban la “prisión de Milagro”; y si no festejaban “estaban muditos de miedo”.
Tanto en Salta como en Jujuy cada uno sabe el rol que le tocó jugar. Entonces, cuidado no todos somos harina del mismo costal. Eso es para tenerlo bien presente.