SAN MIGUEL DE TUCUMÁN (Especial para EL SOL ABC). Son claros los indicios que muestran el declive y camino a su desaparición como estructura política el PRO, partido fundado por Mauricio Macri y que lo llevara a la jefatura de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, porque muchos de sus dirigentes andan perdidos, otros antes que quedarse con nada han preferido irse con los oficialismos provinciales o municipales, como una forma de demostrar que no llegaron al PRO imbuidos de certezas ideológicas, sino más bien pecuniarias.
Los últimos datos apuntan a que la presidenta del PRO a nivel nacional resolviera la intervención del partido en esta provincia, por las desavenencias y porque muchos de sus partidarios se están yendo a la UCR.
Mientras que los voceros del PRO Tucumán señalaron que “el dirigente Pablo Walter será el nuevo interventor del PRO en Tucumán, que se prepara para las elecciones del 14 de mayo.
’’Las autoridades de este aliado clave dentro de Juntos por el Cambio (JxC) finalizan su mandato en los próximos días. Anticipando esta situación, y para evitar una superposición con la votación del 14 de mayo, el Consejo Provincial y la Asamblea Partidaria resolvieron en noviembre de 2022, por mayoría, aprobar una prórroga por un año de la actual conducción.
’’El objetivo de esta medida fue ‘evitar el desgaste de una interna en medio del calendario electoral provincial y el nacional que se nos viene’, explicó el presidente saliente del PRO, Ramiro Beti”, según apreciaron desde dentro del partido.
Lo que realmente pasa
El portal Contexto relató que tres afiliados del espacio decidieron recurrir a la Justicia Federal con competencia electoral de Tucumán.
Según fuentes del macrismo, el objetivo de estos dirigentes era que el PRO local convocara a internas para definir las listas de candidatos de cara a los comicios del 14 de mayo y, además, que se declarara nula la prórroga de los mandatos dispuesta con anterioridad.
En los tribunales les dieron la razón a los afiliados en cuanto a la necesidad de renovar los cargos internos. Y se otorgó un plazo de cinco días para llevar adelante estos comicios.
“En razón de esto, se evaluó como mejor salida para afrontar con menos desgastes los temas internos y la cuestión electoral provincial, solicitar la intervención del distrito”, destacó Beti. Y anticipó que las “nuevas autoridades dispondrán de un tiempo más prudente para convocar a internas partidarias”.
Cerca del mediodía de ayer, se conocieron los nombres de los interventores dispuestos por la presidenta del PRO nacional, Patricia Bullrich.
Se trata del tucumano Pablo Walter, ex senador nacional y ex director de AySA; y del ex diputado Marcelo Wechsler.
Walter, que integra el consejo nacional del PRO, tiene diálogo fluido con Bullrich. Mientras que Wechsler es un dirigente cercano al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
En Salta y Jujuy
La ambivalencia del diputado nacional por el PRO, Carlos Zapata, que un día se levanta tratando se acercarse a las huestes de Gustavo Sáenz, pero otro vuelve al redil y se reúne con la intendenta Bettina Romero, que quiere ser la representante del PRO en Salta para pelearle la gobernación al actual gobernador. Luego de ello, el PRO no existe a nivel provincial. Vanos han sido los intentos de colocar candidatos o hacer listas para el interior provincial, pero no logra juntar adeptos. Sólo la ciudad de Metán tiene algunos, pero que han ido desapareciendo con la dinámica del Peronismo.
En Jujuy, comenzaron con todos los bríos cuando Cambia Jujuy ganara la gobernación. Se los veía en todas las plazas de las ciudades de la provincia con adherentes tratando de captar militantes, que no sólo pasó de una moda. Pero hoy todos los locales partidarios que se abrieron, están cerrados.
