
DOLORES, Buenos Aires (Especial-EL SOL ABC). En la caída también están involucrados Dióxido de Cloro Canosa y Muñeca Vieja Etchecopar, junto a Canalla Lombardi, los que con bombos y platillos avisaron a todos los medios que la puesta en escena en esta localidad del Vasco Etchebarne serviría para el lanzamiento presidencial 2023 de Mauricio Macri.
Y hoy les están lloviendo las facturas a los nombrados, porque a los 400 micros les dieron gps mal programados, que cada ómnibus contratado no pudo salir de su lugar de base o estacionamiento. Y así Mauricio pasó la vergüenza más grande del mundo, que ya es mucho decir.
Mientras tanto, el abogado Lanusse –asesorado por el fiscal Incumplimiento Stornelli— metió la gamba hasta el cuello, aduciendo que “como se van a poner evidencia secretos de máxima seguridad del Estado, el acusado de espionaje Mauricio Macri, debía tener una autorización especial de parte de Presidencia de la Nación”. Ante ello la indagatoria fallida del juez Bava quedó en suspenso para otra ocasión y para cuando desde Presidencia autoricen.
Bava dijo que “hay que respetar todos los reglamentos y acciones que permita la ley, para evitar las nulidades. En esto hay que ser muy prolijos”.
A esa hora todos los canales fueron a cubrir lo que sería el relanzamiento de Macri, con vistas a 2023, ya con el virrey Marc Stanley instalado en el país, pero el rumor comenzó a correr en esta localidad donde los empleados municipales del intendente Etchebarne fueron contratados como “extras de cine” para “hacer número”, dicen, ante el extravío de los 400 micros contratados: Canalla Lombardi y sus asesores “poco seso” Canosa y Etchecopar se habrían hecho “sentar” los dinerillos ahorrados con tanto sudor por Patricia Bullrich, alias la comandanta Pedofijo.
Así no, así no, diría la experimentada Mirtha Legrand del Trece.