JUICIO A ESTAFADORES: comenzaron las sesiones judiciales contra los responsables de la firma Agrinvert SA que dejó un tendal de damnificados en Salta

En la sala de Grandes Juicios de la Ciudad Judicial de Salta ayer se inició el juicio contra María Rosa Manzano, Alejandro Daniel Cedrón y Eduardo Martín Cedrón (de espaldas los tres), propietarios de la financiera que funcionaba en el edificio del hotel Salta por estafas valoradas por 27 denuncias por $19.219.375 y $us 248.564. (Foto: Prensa Poder Judicial de Salta).

SALTA (Especial para EL SOL ABC). En el Salón de Grandes Juicios comenzó hoy una audiencia de debate por estafas reiteradas (27 hechos). Los imputados son dos hermanos Cedrón (49 y 46) y la esposa (45) de uno de ellos. Están acusados de estafar a varias personas a través de una financiera llamada Agrinvert S.A.

Durante la primera jornada se leyó la requisitoria fiscal de elevación a juicio y se dio inicio a la recepción de pruebas testimoniales. Comparecieron algunos de los denunciantes. Los tres acusados desistieron de declarar por el momento.

El juicio es presidido por el juez Eduardo Raúl Sángari. Se llevará a cabo los días 4, 5, 6 y 7 de junio a partir de las 9.30, y el 11, 17, 18, 19 y 20 de junio, desde las 12.30.

La causa

Según consta en la causa, las personas damnificadas firmaron un contrato de mutuo pesos con la firma, cuya presidenta era la imputada, entregando diferentes sumas de dinero con el fin de que fueran invertidas para generar ganancias. La financiera se comprometía a cancelar el crédito en determinado plazo con el reintegro del capital más los intereses pactados.

Las oficinas de la firma funcionaban en el primer piso de un hotel ubicado en pleno centro (Buenos Aires y Caseros). Según declararon los damnificados, los imputados promocionaban su actividad comercial entre personas de alto poder adquisitivo. Muchas veces eran conocidos y amigos que, a su vez, les pasaban el dato a otros familiares que también caían en el engaño.

Algunos de los denunciantes dijeron que los primeros meses la firma solía cumplir con el pago de los intereses, pero luego dejaba de pagar. Ante los reclamos, los acusados se ausentaban del domicilio comercial, no atendían los teléfonos ni respondían los mensajes, por lo que se hacía imposible entrevistarse con ellos.

Según lo manifestado por las víctimas, los imputados ostentaban una situación económica privilegiada (viajes al exterior en aviones privados, casa quinta en la zona del dique Cabra Corral, vehículos de alta gama), por lo que nada hacía presumir que podía tratarse de un grupo dedicado a captar víctimas para desapoderarlas de sus capitales.

Durante la investigación se verificó que ninguna de esas posesiones estaba registrada a su nombre.

Fuente: Prensa Poder Judicial de Salta