BUENOS AIRES (Especial de EL SOL ABC). Muchas cosas están pasando, que el común de la gente no logra determinar ni analizar por qué sucede en este año electoral. Esto comenzó en el momento mismo de la asunción de Alberto Fernández, cuando comenzaron con las jugadas del dólar blue y la información sobre presiones para que uno u otro funcionario ocupe los diferentes ministerios. Lo normal, para un Gobierno que no llenaba el 100 % de requisitos, para hacerlo totalmente afín a las políticas diseñadas por el Departamento de Estado de EE.UU. para los países satélites.
Allí el tándem Prado-Trump era número puesto, ya que se descontaba el triunfo del rubicundo evasor de impuestos y todo hubiere seguido con rulemanes totalmente aceitados, porque el ex embajador Prado conjuntamente con el anterior fueron los artífices de la llegada de Mauricio Macri, además de otros actores comandados desde los medios de comunicación hegemónicos, que son los alfiles disimulados como “agentes de prensa”.
Los nuevos actores
Con la presentación de su renuncia ante el presidente Joe Biden, el 20 de enero pasado, por parte del ex embajador Edward Prado, [1] la Embajada de EE.UU. quedó con la embajadora interina MaryKay Carlson, quien era hasta ese momento la encargada de Negocios para esa representación diplomática. Muchos dicen que, por su afinidad con el Partido Demócrata, será quien finalmente sea formalmente confirmada como la titular de esa casa diplomática.
Ahora hay que ver quiénes son los camuflados agentes de la CIA, que acompañan a Carlson en “la noble misión” de “corroer y destruir” la unidad del peronismo, con todas sus vertientes y disidencias a cuestas: Sección Política: James O’Mealia; Sección Económica: Ernest J. Abisellan; Sección Comercial: Rick A. De Lambert; Oficina de Seguridad Regional: Aaron LaFortune; Agregaduría de Defensa: Willie W. Ortiz; Departamento de Seguridad Nacional: David Edmond y el titular del FBI (nadie sabe qué tiene que hacer un agente federal en esta dependencia) en la embajada: Murry T. Streetman. [2] Bueno, todos estos sujetos se mueven muy disimuladamente, con el carnet de la embajada, por todo el país. Muchos en sus propias pick-ups 4×4, a veces lo hacen en los vehículos oficiales y tienen reuniones “diplomáticas”, donde muchos piden que “esto no trascienda en la prensa, por favor”. Siempre, se llega con el “speach”: “Queremos colaborar”.
Pero el comando de la “botonera central” la tiene Ernest Abisellan, quien tiene permanente contacto con la Cámara de Comercio de EE.UU. en la Argentina, conocida como la AmCham [3], y es la que tiene más de 600 empresas norteamericanas radicadas en el país o son nacionales, [4] que realizan negocios con el mercado de EE.UU. Allí nace el “manejo” de la inflación en la Argentina. Allí está el núcleo de todo el plan contra el Gobierno de Fernández y desde donde nacen las órdenes para que las entidades del campo se rebelen contra el Gobierno y encuentren gobernadores afines, como Gustavo Valdés de Corrientes, que alientan el contrabando de soja por Brasil. Allí la orden es “de no colaboración con el Gobierno”, porque pretenden instalar como reemplazante de Fernández a un sujeto “manejable”, como lo fue Macri, para terminar de destruir a la Argentina.
No es casual, nada es casual
Todo lo que está viendo, no es casual. En estos tiempos, cuando tenemos las elecciones casi en la puerta vamos a ir desatando todos los “nudos” creados para crear el “clima”. Todo está encaminado para desacreditar la gestión del presidente Fernández, que tiene una “serie de infiltrados” –están dentro de su gabinete ministerial— que, si no da vuelta la tortilla y rompe algunos huevos para hacer una nueva, se le va a hacer cuesta arriba.
Pero primero veamos dónde están asentadas las oficinas de la CIA en la Argentina: en primer lugar, por medio del Gobierno de De la Rúa se instalaron, como dependencia policial en la sede del Gobierno porteño. Desde allí se monitorea todo el movimiento satelital de llamadas a la Casa Rosada.
Otra oficina la tienen instalada en el Banco Central de la República Argentina, desde donde se hace el monitoreo del mundo financiero en la Argentina. A lo que hay que agregar, una oficina en la Armada Argentina. Luego delegaciones que figuran como de la DEA, por ejemplo la que funciona en Salta en el Centro Grand Bourg, sede del Gobierno provincial.
Durante la gestión de Cristina Kirchner se había denunciado que en el aeropuerto de Chaco, se pretendía instalar —camuflada como una agencia de control climático— una oficina de la CIA. También nuestras fuentes nos comentaron que existe una, que mueve material y logística, está en el edificio Catalinas Sur. Allí figura como una consultora económica.
Con toda esta descripción, es bueno que el lector comience a analizar los hechos que no suceden fortuitamente. Allí puede ir viendo los actores, los hechos y quiénes son las figuras que debemos ir cambiando:
1.- Jugada con el dólar blue, acción coordinada entre medios de prensa del establishment, con las principales entidades financieras extranjeras, a la que se suman las grandes empresas industriales del país.
2.- Hasta ahora el Estado nacional no puede cobrar el tremendo saqueo de las arcas del Banco de la Nación Argentina, con el préstamo de González Fraga a la firma Vicentin por más de 300 millones de dólares. No hay detenidos ni la causa avanza.
3.- Resulta que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, en un abrir y cerrar los ojos pide la desafectación del diputado kirchnerista Juan Ameri, de Salta, pero antes ni una multa ni suspensión para diputados como Esteban Bullrich y otros de Juntos por el Cambio, que con sus actitudes también violaron las normas de la referida cámara legislativa. Céntrese en este dato no menor, para ir hilando fino.
Al otro día, todas las cámaras y grabadores de la prensa hegemónica tras de Massa, que por poco no lo alzan en andas. Hasta el programa de Mirtha, con Juana Viale al frente, pidió exclusiva con el jefe del Frente Renovador.
4.- Sublevación de las entidades rurales por medidas del Gobierno, cuando está probado que existe segmentación para el cobro de retenciones y donde más de 100 mil productores se ven beneficiados por los reintegros a los cultivos de soja y maíz, cuando no sobrepasen las 400 hectáreas de área producida.
5.- Incendios de campos en localidades de las provincias de Córdoba y Santa Fe, como asimismo en el Delta del Paraná. Donde el 80 % de los casos está comprobado que fueron intencionales denunció la organización Greenpeace.
6.- Los aumentos continuos de los alimentos, preferentemente los de la canasta familiar, a pesar de los acuerdos alcanzados por el Gobierno con distintas cámaras empresariales. En ello, se ve la carne y la harina, como el azúcar, tres elementos clave en la alimentación de los argentinos.
Para tener en cuenta, lo político
En lo político, usted amigo lector debe comenzar a tomar en cuenta, lo siguiente: el ministro Ginés González García expresó a la prensa que “yo no autoricé directamente ni a Vertbisky ni a Aranda, sólo les sugerí que fueran al hospital Posadas para registrarse y allí hacerse vacunar. Luego yo viajé a Entre Ríos, y desde la Secretaría del Ministerio de Salud se produjeron las llamadas invitando a Vertbisky y a Aranda a vacunarse en el Ministerio. Allí debe averiguarse quién dio la orden y por qué se hicieron esas llamadas”, dijo Ginés tratando de aclarar, luego de su desafectación del cargo.
Ahora veamos el “gabinete”, a instancias de Massa, que formó Alberto Fernández y que está en conflicto permanente y que el Presidente no le da el “corte” como sí lo dio en la cartera de salud:
A) Daniel Arroyo, denunciado como miembro de la Red de Acción Federal (RAF), ong que maneja el Departamento de Estado de EE.UU. en la Argentina, en los comienzos del armado de la Tarjeta Alimentar se denunció y se comprobaron sobreprecios. Jamás se le pidió la renuncia. De dónde proviene: Frente Renovador.
B) Felipe Solá, canciller, no maneja con fluidez las relaciones con los países latinoamericanos. Tuvo un entredicho con el Gobierno venezolano al que acusó de “dictadura”, cuando está comprobado que la actual administración llegó por el voto popular. Hasta ahora fue nula su participación en la consecución de las vacunas contra el Covid-19. Pertenece al Partido Renovador. Sí consiguió reuniones con el presidente masacreador del pueblo chileno, Sebastián Piñera, pero se olvidó de Rusia y de China, que son los que más invierten en el país.
C) Victoria Donda, en un caso mucho más grave para la sociedad, que usufructuando del cargo que ostenta, quiso deslindar responsabilidades personales, ofreciendo cargo en el Estado. Tráfico de influencias, de acá a la China. No pasó nada. A qué sector pertenece: Frente Renovador.
D) Nicolás Trotta, ministro de Educación, también figura como miembro de la ong RAF, fue denunciado por tener cuenta off-shore en paraíso fiscal. Todo se silenció. Proviene del Frente Renovador.
E) Marcela Losardo, ministra de Justicia, está como pintada ante el permanente avance de Comodoro Py sobre las instituciones democráticas de la República. Proviene del Frente Renovador.
Con todo este cuadro descriptivo, el Consejo Nacional del Partido Justicialista debe llamar a una reunión con todos los dirigentes de los otros partidos que integran el Frente de Todos, para acordar las estrategias de defensa contra toda esta andanada de recursos como acciones desplegadas desde los alfiles que mueve la Embajada de EE.UU. en la Argentina. Se está a tiempo, pero que no se utilice la pandemia como “excusa” para eludir las responsabilidades que exige la mayoría del pueblo argentino.
Fuentes: Archivos propios de EL SOL ABC – Fuerzas de Seguridad nacionales- Greenpeace – Prensa de gobiernos provinciales del NOA y NEA- Red de Periodistas Independientes.
Referencias:
[1] Nota de prensa de https://ar.usembassy.gov/es/embassy-es/buenos-aires-es/funcionarios/
[2] Nota sobre funcionarios que acompañan a la embajadora Carlson-https://ar.usembassy.gov/es/embassy-es/buenos-aires-es/funcionarios/
[3] Cámara de Comercio de EE.UU. en la Argentina, que tiene como socios a empresas argentinas como las azucareras Ledesma y Tabacal, la aceitera AGD, Molinos Río de la Plata, Arcor, Cargill, Monsanto, las principales firmas de línea blanca, en telefonía Motorola y todas las redes sociales como Facebook, Twitter, que son divisionales de Google.- https://www.connect.amcham.com.ar/
[4] Listado de empresas argentinas asociadas a AmCham-https://www.connect.amcham.com.ar/
