SALTA (Especial para EL SOL ABC-Por Azul Almudena). Mientras se inauguran portales y se llenan de marketing con el “Mapa Violeta”, en Salta las víctimas siguen desprotegidas, revictimizadas y burladas por una Justicia corrupta, lenta y cómplice.
¿De qué sirve saber dónde denunciar, si nadie te escucha y nadie actúa?
La realidad que no quieren mostrar:
- Denuncias archivadas sin ser leídas.
- Jueces, fiscales, asesores y defensores denunciados por mal desempeño que siguen firmando resoluciones.
- Desobediencias judiciales que quedan impunes: agresores violan medidas y no pasa nada.
- “Protección” que se limita a consignas policiales cuando la fuerza NO da abasto.
- Atención médica y psicológica deficiente: diagnósticos exprés que se acomodan según intereses.
- Maltrato institucional en los pasillos de Ciudad Judicial, donde las víctimas son tratadas como molestia.
Y el blindaje institucional viene de arriba:
- El procurador Pedro García Castiella maneja una estructura diseñada para tapar todo.
- ¿Cómo? Con su “GRUPO SELECTO DE ABOGADOS” dentro del Ministerio Público Fiscal.
- Un círculo cerrado de funcionarios que se encarga de recibir las denuncias por mal desempeño, y directamente archivarlas o encubrirlas.
- Ellos deciden a quién proteger, qué expediente cajonear, y qué escándalo hacer desaparecer.
Red de impunidad
Una red de impunidad donde todo queda entre amigos. Y mientras tanto, las víctimas mueren, los agresores caminan libres, y los funcionarios responsables siguen cobrando sueldos públicos sin dar respuestas.
¿Quién los controla? ¿Quién responde por las vidas destruidas? ¿Cuántos muertos más necesitan para actuar? Basta de simulacros de justicia. Basta de protegerse entre ellos. Basta de impunidad judicial en Salta.