
SALTA (Especial para EL SOL ABC). Ayer martes la mayoría de las bancadas en la Cámara de Diputados de la Provincia aprobó casi por unanimidad el rechazo al veto presidencial a las leyes aprobadas por el Congreso Nacional en defensa de los jubilados, discapacitados, universidades y del hospital de niños Garrahan, por lo cual se insta a los legisladores nacionales por Salta a rechazar cualquier moción en contra por parte del Ejecutivo nacional.
Así, ayer martes, en la cámara baja, el expediente Nº 91-52.731/25, presentado por una amplia bancada integrada por 27 diputados provinciales de diversos bloques bajo la conducción del bloque del gobernador Gustavo Sáenz, planteó la necesidad de que los legisladores nacionales por Salta actúen en defensa de estos proyectos vetados por Decreto Nacional N° 534/2025.
El informe presentado por el miembro informante Germán Rallé planteó con claridad la urgencia de la situación: “Nosotros venimos a pedir que nuestros legisladores tomen posición, porque el veto presidencial a estas leyes representa un ataque directo a los derechos de un sector que merece vivir con dignidad, nuestros adultos mayores y las personas con discapacidad”. Rallé subrayó que estas leyes eran herramientas para garantizar derechos fundamentales y que su rechazo demuestra un “desprecio por quienes han contribuido y ahora necesitan el respaldo del Estado”.
Diputados de la provincia de Salta aprobó por unanimidad un proyecto de declaración que insta a los legisladores nacionales por la provincia a rechazar el veto presidencial a tres leyes clave para los sectores más vulnerables del país: el incremento de jubilaciones y pensiones, la continuidad de la moratoria previsional, y la declaración de emergencia nacional en materia de discapacidad. Aunque desde la oposición se retiraron en señal de protesta, el respaldo fue unánime entre los diputados presentes y ahora la iniciativa será elevada al Senado.
Intenso debate
La sesión se vio atravesada por un debate intenso y diverso. El diputado Roque Cornejo hizo gala de su alocución cargada de ironías y recordó que Salta es la cuarta provincia con mayor presión tributaria y que la pregunta fundamental es “de dónde sacar recursos”. Propuso, “hacer una vaquita” con las fortunas acumuladas en gobiernos anteriores que, según él, gestionaron negligentemente el sistema previsional. Asimismo, instó a las provincias a acompañar los esfuerzos nacionales y a controlar los gastos innecesarios.
José Gauffin, por su parte, puso en perspectiva la discusión en torno a la economía nacional: “No hay plata”, reconoció, pero enfatizó que la discusión debe centrarse en prioridades y políticas maduras, dejando de lado “culpar al kirchnerismo o a Milei” y entendiendo que la economía “incluye a la gente”. Señaló que la solución no vendrá sólo del mercado y que el presupuesto prorrogado dificulta establecer prioridades claras.
Soledad Farfán, una de las firmantes, reclamó que “con los jubilados no”, denunciando que los vetos postergan a los sectores que más necesitan apoyo. Denunció gastos exorbitantes en áreas como la SIDE, trolls en redes sociales y publicidad estatal de YPF, planteando que esos recursos podrían destinarse a las necesidades de jubilados y discapacitados. Otros diputados, como Gustavo Orozco, manifestaron su sorpresa por la oposición a este proyecto y acusaron al gobierno nacional de ser “muy capitalista con los más débiles”, en referencia a la dureza de las medidas de ajuste. La comparación entre el gasto en seguridad e inteligencia y las condiciones de vida de miles de argentinos que “no tienen agua ni alimentos básicos” se hizo presente en varios discursos. El diputado Jorge Restom se focalizó en la situación de las personas con discapacidad, calificando como “cruel” la política del gobierno nacional que ignora esta emergencia social.
Fuego amigo
Griselda Galleguillos, diputada cercana al espacio liberal, expresó su profunda decepción con las políticas actuales del presidente Milei. “Apoyé la campaña presidencial porque creí en la libertad y en terminar con la corrupción, pero apoyar no significa arrodillarse. No veo proyectos para reducir los privilegios de los políticos, ni para recortar las dietas millonarias que cobran los diputados nacionales”. Subrayó que es necesario “gestos reales” y poner límites a los errores del Ejecutivo para ser leal al pueblo.
Para cerrar el debate, Germán Rallé evocó una reflexión del Papa Francisco, símbolo universal de la solidaridad y la defensa de los más pobres: “Si no se recupera el encuentro y un nuevo equilibrio, se llega a un empobrecimiento grave del pueblo. La libertad sin justicia social se convierte en autoritarismo”.
Fuente: Nuevo Diario de Salta